IBM apuesta por la nube

El gigante azul ha dado un importante paso para muchos clientes al ofrecer sus propias soluciones de Cloud Computing, y lo hace con un enfoque distinto: el de las «nubes de tarea específicas», más pequeñas e independientes. La idea es la de ofrecer que ciertos procesos de negocio se puedan trasladar a servicios de Cloud Computing, pero no sólo eso: ahora IBM garantiza la seguridad, fiabilidad y eficiencia de estos servicios.

En el New York Times afirman que IBM es una especie de «rey Midas» que convierte todo tipo de nuevas tecnologías en verdaderos éxitos. Ya lo hizo con la informática personal en los años 80, y su apuesta por Linux también ha sido evidente a la hora de implantar este tipo de soluciones en la gran empresa.

Parece que ahora han tomado por fin la decisión de apostar por la Computación en la Nube, un tipo de tecnología que cada vez más y más empresas están promocionando para facilitar el acceso a todo tipo de servicios a empresas y usuarios finales.

Para ello, IBM está centrándose en un nuevo tipo de acercamiento a este concepto, que ha dado en llamar «task-specific clouds», o «nubes de tarea específicas», más independientes, más reducidas en su puesta en marcha, y que permiten solucionar problemas concretos a las empresas a través de servicios de Cloud Computing. El anuncio de IBM se divide en tres grandes áreas: 

      1. Smart Business Test Cloud: una nube privada que está disponible internamente y a la que no afectan los cortafuegos de la empresa.

      2. Smart Business Development & Test en la Nube IBM: que permite desarrollar y evaluar las prestaciones de los servicios de este tipo.

      3. IBM CloudBurst: una serie de soluciones completas que incluyen en hardware, almacenamiento, tecnologías de virtualización y comunicaciones necesarias para poner en marcha estos servicios.

Sam Palmisano, CEO de IBM, explicaba en el artículo original que «la infraestructura de las tecnologías de la información ya está bajo estrés actualmente, y el flujo de datos no hace más que acelerar. Hemos decidido que para resolver esos problemas es necesario organizar la tecnología alrededor de las cargas de trabajo«.

La estrategia de IBM viene acompañada de un servicio de escritorios virtuales que permitirán a las empresas recuperar el concepto de thin client que accederán a servicios en la nube interna de la empresa y que teóricamente mejorará las infraestructuras de los negocios. Ahora habrá que ver si la apuesta de Microsoft logra convencer definitivamente a las empresas de que la filosofía Cloud Computing puede ser de mucha utilidad para sus propósitos.