Conecta con nosotros

Noticias

Samsung hace una apuesta arriesgada para recuperarse en mercados emergentes

Publicado el

La pujanza de los fabricantes chinos de smartphones en los mercados emergentes, gracias a sus terminales baratos, ha hecho que Samsung abandone el primer puesto en ventas en 2014 y 2015 en países como China, India e Indonesia. El fabricante no ha podido competir con ellos ya que sus terminales resultan bastante caros para el presupuesto de la mayoría de sus habitantes (hasta un 25% más que los teléfonos de sus competidores), por lo que ha realizado una contraofensiva a costa de bajar los precios de sus móviles de gama baja, según el Wall Street Journal.

La compañía cree así que puede ganar la partida a empresas como la china Xiaomi, que acostumbran a lanzar terminales de precio muy ajustado y con características propias de los smartphone de gamas media-alta y alta, como un procesador potente o una cámara de buena calidad. Todo, por un precio que no suele superar los 250 dólares.

Samsung ya comenzó a dar muestras de su cambio de política desde el año pasado, con el agregado de funciones presentes en sus móviles de gama alta, que en muchos casos cuestan más de 600 dólares, a los de sus gamas baja y media, con un precio comprendido entre los 100 y los 300 dólares. Y el lanzamiento de su Galaxy J, cuyos modelos más recientes han sido rediseñados para que el aspecto fuese más parecido al de los Galaxy S, ha tenido muy buena acogida en países como India e Indonesia, le ha llevado a apostar por una política de precios más agresiva en países emergentes. Los Galaxy J, con precios que oscilan entre los 100 y los 250 dólares,, ofrecen funciones como modo de ahorro de datos, que en países en los que los planes de datos son bastante limitados pueden ser atractivos para los consumidores que quieren controlar su gasto.

No obstante, los analistas ya han avisado a Samsung de los peligros de esta decisión si se mantiene a largo plazo. En primer lugar, no creen que sea la panacea para dar la vuelta a la situación de su división de negocio de móviles en ciertos mercados. Además, puede incidir en los márgenes de beneficio de la empresa, aunque por ahora podrían ayudarle a recuperar su cuota global de mercado, que el año pasado cayó hasta el 22,3 por ciento. En 2013, su cuota era del 31 por ciento. Sus márgenes de beneficio bajaron del 16,1 por ciento en 2014 al 8,9 en 2015. Samsung planea subir estos márgenes reduciendo costes de producción y reduciendo la cantidad de modelos de smartphone que saca al mercado, pero esto puede no ser suficiente para regresar a la senda del crecimiento para Samsung.

Por ahora, con esta nueva estrategia, en la India ha recuperado cuota de mercado: del 22 por ciento el tercer trimestre de 2015 ha pasado a un 26 por ciento en el trimestre final del pasado año y ha conseguido destronar a Micromax, un rival local. En Indonesia, Samsung consiguió recuperar en el tercer trimestre de 2015 el liderazgo perdido a costa de Evercoss Indonesia en el segundo trimestre del año.

En China, Samsung lo tiene más complicado, puesto que sólo es el número seis en ventas de smartphones. Con el lanzamiento de la gama Galaxy A, de gama media y cámaras frontales de calidad más que aceptable, esperan remontar en los próximos meses. Pero, tal como hemos mencionado, Samsung corre muchos riesgos si sigue con esta estrategia a largo plazo. Y no sólo en cuanto a beneficios, sino que su imagen de marca también podría quedar resentida.
Foto: Ceficefi

Lo más leído