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Los hackers vuelven a cebarse con las instituciones norteamericanas

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A medida que se van acercando las elecciones presidenciales de Estados Unidos, que se celebrarán el próximo mes de noviembre, las noticias relacionadas con dichos comicios no hacen más que crecer como los ríos tras el deshielo de primavera. Por norma general, la mayoría de las noticias están relacionadas, claro, con los candidatos y sus campañas (una vez pasado el espectáculo mediático de las primarias de ambos partidos). Pero en ocasiones se cuelan otras informaciones que, en realidad, son mucho más importantes y deben ser tenidas muy en cuenta, pues plantean una seria amenaza. Tal es el caso, como informa hoy Cnet, del problema de seguridad experimentado por las bases de datos de votantes de los estados de Arizona e Illinois, según ha revelado una investigación del FBI.

En la nota publicada por la agencia, titulada «Targeting Activity Against State Board of Election Systems» y que puedes consultar haciendo click aquí, se informa de que a lo largo de este verano se detectaron dos intrusiones en los servicios web del censo de dos estados (en el informe no se indica cuáles). Fuentes que han hablado con Yahoo! News, que es quién ha obtenido una copia de dicho informe, son las que han informado de cuáles son los estados afectados por dicho problema de seguridad, además de haber facilitado a la web una copia del informe de la agencia federal.

En el caso de Illinois, los atacantes han logrado hacerse con los datos de hasta 200.000 votantes censados en la misma, mientras que en el caso de Arizona se detectó malware en sus sistemas, pero no hay indicios de que este haya sido empleado para obtener o manipular los datos que se almacenan en sus bases de datos. No obstante, la simple presencia de ese código malicioso ya supone una singular amenaza. Así, se ha instado al resto de organismos relacionados con el proceso electoral de noviembre a tomar medidas con el fin de asegurar sus sistemas. A principios de mes, el Secretario de Interior (Homeland Defense), Jeh Johnson, afirmó que le preocupaba que los ciberterroristas pretendieran influir en las elecciones presidencialesd e noviembre, e instó al gobierno federal a considerar todos los elementos relacionados con el mismo cono infraestructuras críticas.

No podemos olvidar que hace solo una semana se supo que la NSA había sido hackeada, y que no es la primera vez que oímos hablar de problemas de seguridad informática a lo largo de esta campaña electoral estadounidense (con Donald Trump invitando a hackers y delincuentes a atacar los sistemas del equipo de Hillary Clinton). Lo que está claro es que las instituciones de Estados Unidos están en el punto de mira, y que estas deben tomar medidas de manera muy urgente para evitar los riesgos de un ataque exitoso contra sus infraestructuras.

 

Imagen: Theresa Thompson

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