Conecta con nosotros

Noticias

La multa de 13.000 millones de euros a Apple genera confusión y enfado

Publicado el

La decisión de la Unión Europea de obligar a Apple a devolver a Irlanda unos 13.000 millones de euros en concepto de impuestos atrasados y no pagados en su día puede parecer para algunos una decisión que vaya a encantar al país. Pero no ha sido así. El Gobierno de Irlanda, lejos de estar satisfecho, ha anunciado que apelará esta decisión, lo mismo que hará Apple; no obstante, con una decisión que le aportaría de una tacada el 30 por ciento de lo que recauda con sus impuestos en un año

La Unión Europea, tal como apunta el Wall Street Journal, también da un severo toque a Irlanda en el texto en el que comunica su decisión con respecto a Apple. Según sus miembros, Irlanda permitió a Apple desplazar de forma injusta los beneficios de su división en el país, cantidad que incluye los conseguidos por todas las divisiones europeas de la empresa, a una «oficina central» que no está sujeta a impuestos en ningún país y que, como ha manifestado la Comisión, solo existe en el papel. Con esta práctica, se reduce la tasa fiscal que pagan las filiales de Apple a menos de un 1%, y a ojos de la UE, crea un sistema ilegal para evitar el pago de impuestos.

Como es evidente por la reacción del Ministro de Finanzas irlandés, Michael Noonan, en Irlanda hay miedo a perder lo que su baja fiscalidad para empresas, de sólo un 12,5%, ha aportado hasta ahora al país: gran cantidad de puestos de trabajo. En Irlanda temen que esta y otras decisiones que pueda tomar la UE en el futuro afecten a las decisiones de las empresas a la hora de establecer su sede en Europa, y que tanto Irlanda como sus trabajadores queden fuera de sus planes al desembarcar en el continente.

La fiscalidad de Irlanda no variará

A la vista de esta decisión, que puede tardar varios años en aplicarse porque se va a apelar, podría pensarse que otros estados miembros de la Unión Europea se beneficiarán de ella. Pero no. Es una regla que se aplica únicamente a un acuerdo que ya no existe, por lo que no cambia nada. A pesar de que el país ofrece una baja tasa fiscal, no es de eso de lo que trata la sentencia, sino del hecho de que, según la Comisión, Irlanda aplica su ley sobre impuestos de forma más favorable para Apple que para otras empresas.

Tampoco están contentos con la decisión en Estados Unidos, puesto que sus gobernantes han declarado que la decisión de la Comisión Europea debilita el sistema internacional de impuestos. A la vista de los hechos, nadie aparte de los que han tomado la decisión parecen estar satisfechos con ella. Y esta ausencia de vencedores subraya la dificultad para emprender una reforma del sistema de impuestos a nivel internacional.

El principal problema para los políticos que abogan por cambiarla reside en que hay países que usan su sistema fiscal para competir a la hora de atraer inversión extranjera. Esto solo tendría visos de solucionarse si los políticos cediesen y decidieran ceder el control de sus sistemas nacionales de impuestos de cara a la creación de uno transnacional y global. Pero en la actualidad es prácticamente imposible. A muchos países, por el motivo que acabamos de mencionar, no les interesa, y no parece que la situación vaya a cambiar en un futuro cercano.

Y mientras los políticos discuten y se pelean, las empresas siguen a lo suyo. Y es que no importa lo que se decida finalmente en el caso de Apple, Irlanda seguirá teniendo una tasa de impuestos de 12,5 por ciento y atrayendo multinacionales que llegan a Europa. Sobre todo, las procedentes de Estados Unidos.

Lo más leído