Uber, ¿mentirosa?

Tras varias polémicas con sus conductores, Uber ha llegado a un acuerdo con la Comisión Federal de Comercio para poner fin a una demanda que decía que la primera engañaba a sus empleados para trabajar en su servicio. Uber lo habría hecho desde finales de 2013 hasta bien entrado 2015, con mentiras sobre lo que iban a ganar y lo que iban a tener que pagar para comprar un coche a plazos. Todo para competir con su rival, Lyft.

Uber convenció a numerosos estadounidenses para que se convirtiesen en conductores de su servicio a base de mensajes atractivos sobre lo fácil que podrían ganar dinero trabajando para él. Los conductores que se apuntan al servicio son tratados como autónomos, por lo que no se benefician de las ventajas y mecanismos de protección de los que gozan los trabajadores a tiempo completo.

Según Associated Press, la compañía ha acordado pagar 20 millones de dólares para que se retire esta demanda, un acuerdo alcanzado después de que la Comisión alegase de que la mayoría de los conductores que trabajaban en 18 grandes ciudades de Estados Unidos ganaban mucho menos de lo que la compañía afirmaba en su página web que podían hacer. Los reguladores también sostenían que los conductores acabaron pagando una cantidad notablemente mayor por la financiación de sus coches de lo que la empresa había asegurado. Este acuerdo se produce meses después de que pactase pagar 25 millones para acabar con otra demanda por engañar a sus clientes.

El propio CEO de Uber, Travis Kalanick, ha mentido en el pasado sobre lo que ganan los conductores del servicio en Nueva York. Tal como afirma en un comunicado publicado en la web de la empresa entre mayo de 2015 y septiembre de 2015, la renta media anual de los conductores allí era superior a los 90.000 dólares, mientras que lo que ganaba de media un conductor en San Francisco era de 74.000 dólares. Pero según las investigaciones de la Comisión, la realidad es que el salario era un tercio inferior a lo afirmado, con ingresos medios de 61.000 dólares anuales. En San Francisco ganaban de media 53.000 dólares.

Uber revisó sus afirmaciones en agosto de 2015, y desde entonces especifica que los ingresos de los conductores en ambas ciudades son «potenciales». No obstante, la Comisión Federal de Comercio asegura que menos del 10% de los conductores consiguen ese salario. Por otro lado, los reguladores han establecido que las ganancias por hora se exageraron también en otras 16 ciudades estadounidenses.

En palabras de Jessica Rich, directora de la Oficina de Protección al Consumidor de la Comisión Federal de Comercio, «muchos consumidores se apuntaron a conducir para Uber, pero no deberían haberles engañado sobre sus ganancias potenciales o sobre los costes de la financiación de un coche a través de la empresa«.

Uber ha comentado que han introducido «muchas mejoras en la experiencia de conducción del conductor a lo largo del pasado año«, así como que seguirán «centrándose en asegurarse de son la mejor opción para cualquiera que quiera ganar dinero gestionando su propio horario«.  La mayoría del dinero que abonará para acabar con esta demanda irá a parar a los conductores. Se desconoce cuánta gente recibirá una parte, y tampoco se sabe cuánto recibirá cada uno.