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Snapchat se permite el lujo de vetar datos a posibles inversores

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Ya llevamos algún tiempo hablando de la más que esperada salida a bolsa de Snapchat, en la que los analistas en general coinciden en que puede ser la de mayor volumen durante todo 2017. La tecnológica lleva ya mucho tiempo en el punto de mira de los inversores, que ven en la misma un excelente potencial de crecimiento y, por lo tanto, de grandes beneficios económicos para quienes participen en la operación desde el primer momento. Tanto es así que, según informa hoy la Agencia Reuters, Snap Inc. (empresa propietaria del servicio) se puede permitir el lujo de vetar el acceso a la documentación de la operación a los bancos de inversión interesados en la misma.

Concretamente, y tal y como informa la agencia, algunos bancos de inversión pretendían acceder a la documentación presentada por la empresa al regulador, en la que se encuentran múltiples datos que resultan de gran importancia para poder evaluar las posibilidades y los riesgos que supondría participar en la operación de salida a cotización. Sin embargo, y en la línea mantenida por la empresa, de tratar toda su información con el máximo hermetismo, ha impedido que estos potenciales inversores pudieran acceder a la información, algo realmente inusual en este tipo de circunstancias. Y es que la confidencialidad de Snapchat no se limita a la que ofrece su servicio de mensajería instantánea, sino que forma parte del ADN de la empresa, considerada ya desde hace tiempo como una de las menos dadas a las filtraciones internas.

Solo los bancos de inversión que han participado desde el principio en la operación, Goldman Sachs y Morgan Stanley, han tenido posibilidad de revisar y aportar modificaciones en el documento de registro presentado en el regulador. El resto de empresas interesadas, deben «conformarse» con mantener reuniones con directivos que, afirman, responderán a todas sus dudas y, además, los pondrán en contacto con los abogados de los suscriptores iniciales (GS y MS). En el grupo de los que se han «quedado fuera» podemos encontrar entidades como Citigroup Inc. y el Royal Bank of Canada, que solo tendrán acceso al documento al mismo tiempo que el resto de inversores (incluidos los particulares) que quieran invertir en la tecnológica.

Los analistas coinciden en que esta actitud es bastante inusual, y que muy pocas empresas se pueden permitir adoptar una actitud como esta. En palabras de Christopher Austin, de Orrick Herrington & Sutcliffe LLP, «No puedo imaginar ningún otro acuerdo en el cual los bancos permitirían que ocurriera algo como esto». Y es que, en los bancos de inversión, se suelen formar equipos dedicados a analizar exhaustivamente la documentación de todas las posibles operaciones, con el fin de afinar al máximo sus posiciones en cada operación. En este caso no pueden hacerlo, pues carecen de gran parte de la documentación necesaria. Esta es, sin duda, una postura que solo se pueden permitir empresas que, como Snapchat, han generado tan altas expectativas en su paso a ser cotizadas.

 

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