Qualcomm se siente injustamente tratado por Apple

Como no podía ser de otra manera, Qualcomm acaba de responder a la demanda que Apple les presentó, hace tres meses, por un supuesto uso ilícito de sus cuotas de licencias móviles. En aquella ocasión, los de Cupertino reclamaron 1.000 millones de dólares por daños y perjuicios, pero Qualcomm ha demostrado que quiere seguir en esta guerra con una contrademanda de 134 páginas en las que exigen «una indemnización» a Apple y que esta «no se meta más en los acuerdos que tiene con las compañías que fabrican sus productos«.

Don Rosenberg, vicepresidente ejecutivo y consejero general de Qualcomm, ha explicado los motivos del contraataque con más detalles: «A lo largo de los 10 últimos años, Apple ha jugado un papel significativo en el acercamiento de los beneficios de la tecnología móvil a los consumidores, con productos y servicios populares. Pero no podría haber desarrollado la increíble franquicia del iPhone sin las tecnologías móviles de Qualcomm, que la ha convertido en la empresa más rentable del mundo, atesorando cerca del 90% de los beneficios de los smartphones,«.

Por su parte, la versión de Apple la encontramos en Cnet: «Durante muchos años, Qualcomm ha insistido de manera injusta en cobrar royalties por tecnologías con las que no tienen nada que ver. Cuanto más innova Apple con características únicas como el TouchID, las pantallas y cámaras avanzadas, por nombrar algunas, más dinero recauda Qualcomm sin razón, y para Apple se hace más caro financiar estas innovaciones«.

¿Qué incluye la contrademanda?

En esta ocasión, Qualcomm acusa a Apple, entre otras cosas, de ruptura de contrato y de interferir con los acuerdos y relaciones con los fabricantes con los que trabajan ambos. También sostiene que les habrían ocultado una cantidad de dinero adeudada por un contrato relacionado con una función de alta velocidad de sus chips. Además, asegura que Apple ha dañado a Qualcomm «por hacer afirmaciones falsas a agencias gubernamentales sobre el negocio de sus chipset y sus prácticas de licencias de forma deliberada«.

La larga lista de acusaciones se completa con la de una supuesta manipulación de los chips de Qualcomm en el iPhone 7 para que su rendimiento fuera parecido a los de Intel (en este modelo de teléfono, Apple utiliza chips de ambos fabricantes), parece ser que las comparativas daban a los primeros un «rendimiento superior en los iPhones», que querrían que pasara inadvertidos.

Para ellos, el objetivo de Apple está claro: «sacar partido de su inmenso poder para forzar a Qualcomm a aceptar menos de lo que es un valor justo por sus tecnologías patentadas, que han desembocado en innovaciones en la tecnología móvil, ayudando a Aplpe a conseguir más de 760.000 millones de beneficios por las ventas del iPhone«.