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Mark Zuckerberg, en Harvard: «A cualquiera que trabaja en algo grande le van a llamar loco»

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Facebook nació en una habitación de un colegio mayor de Harvard en 2004. Su creador, Mark Zuckerberg, era por aquel entonces un estudiante más de una de sus facultades. Al año siguiente, en 2005, abandonó sus estudios para centrarse en hacer crecer la red social hasta convertirlo en lo que es en la actualidad, una de las principales tecnológicas del mundo.

Quizá el no haber terminado la carrera es una de las pocas espinitas que Zuckerberg tiene clavadas. Al fin y al cabo, es algo que no ha terminado. Por eso, cuando esta semana regresó a nuevo a Harvard para recibir un título honorífico, no quiso dejarlo pasar por alto, y fue una de las cosas que mencionó en su discurso de agradecimiento ante los alumnos recién graduados.

Evidentemente, no es lo único de lo que ha hablado Zuckerberg en su discurso, ya que también se ha ocupado de hablar tanto de su vida en Harvard como de temas menos mundanos, como la lucha contra la desigualdad y la toma de riesgos en aras de la innovación. De hecho, su discurso ha dejado muchas frases memorables, y a continuación reproducimos las diez citas de su intervención, recogidas por Associated Press, que quizá sean las más destacadas:

  • «Seamos sinceros, habéis conseguido algo que yo nunca pude. Si termino hoy este discurso, será la primera vez que logre terminar algo aquí, en Harvard«.
  • «Mi mejor recuerdo de Harvard es conocer a Priscilla. Acababa de terminar esta web de coña, Facemash, y la junta directiva quería «verme». Todo el mundo pensaba que me iban a expulsar. Mis padres condujeron hasta aquí para ayudarme a recoger mis cosas, y mis amigos me dieron una fiesta de despedida. La suerte quiso que Priscilla estuviese en esa fiesta con sus amigos. Nos encontramos en la cola del baño en la residencia Pfoho Belltower, y en lo que debe parecer una de las citas más románticas de todos los tiempos, me giré hacia ella y le dije: «Me van a expulsar de aquí dentro de tres días, así que tenemos que tener una cita ¡rápido!«.
  • «Las ideas no llegan completamente formadas y definidas. Solo se convierten en algo claro cuando trabajas en ellas. Solo tienes que empezar. Si tuviese que haber sabido todo sobre conectar gente antes de empezar, nunca habría desarrollado Facebook«.
  • «Ser idealista está muy bien. Pero estad preparados para malentendidos. A cualquiera que trabaja en algo grande le van a llamar loco, incluso aunque termine teniendo razón«.
  • «Hay algo mal en nuestro sistema, ya que yo puedo irme de aquí y ganar miles de millones de dólares en diez años, mientras que millones de estudiantes ni siquiera se pueden permitir devolver sus créditos o plantearse empezar un negocio«.
  • «Cada generación expande su definición de igualdad. Las anteriores lucharon por el voto y los derechos civiles. Tuvieron el New Deal y Great Society (planes de desarrollo para combatir la desigualdad). Ahora ha llegado el momento de que nuestra generación defina un nuevo contrato social».
  • «Debemos explorar ideas como la renta básica universal para asegurarnos de que todos tienen un colchón para probar con nuevas ideas. Todos vamos a cambiar de trabajo y de roles muchas veces, por lo que necesitamos cuidados para los niños asequibles para poder trabajar, así como asistencia sanitaria que no esté ligada a quien te da trabajo«.
  • «Los millenials son una de las generaciones más caritativas de la historia. En un solo año, más de tres de cada cuatro millenials estadounidenses han hecho donaciones a obras de caridad, y más de siete de cada diez han recaudado dinero para otros. Pero esto no va solo de dar dinero. También podéis dar tiempo. Os prometo que si invertís solo una o dos horas a la semana, es todo lo que necesitáis para echar una mano a alguien y ayudarles a alcanzar su potencial».
  • «Cada generación abre el círculo de gente que consideramos «uno de los nuestros». En nuestra generación, eso incluye a todo el mundo. Pero vivimos en unos tiempos inestables. Hay gente que se ha quedado atrás por la globalización en todo el mundo. Y es duro preocuparse de la gente de otros lugares cuando en primer lugar no estamos satisfechos con nuestras vidas aquí. Hay presión para preocuparse por lo propio«.
  • «Esta es la dificultad de nuestro tiempo. Las fuerzas de la libertad, la apertura y la comunidad global contra las del autoritarismo, el aislacionismo y el nacionalismo. Las fuerzas del flujo del conocimiento, el comercio y la inmigración contra los que quieren ralentizarlos. No es una batalla de países. Es una lucha de ideas«.

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