Toshiba negocia con Western Digital la venta de su división de chips de memoria

El culebrón de la venta de la división de chips de Toshiba parece estar llegando a su fin. Tras un parón en el proceso, provocado por el estancamiento de las negociaciones con el grupo de empresas y entidades seleccionado por Toshiba para venderle su filial, así como por las protestas de Western Digital para intervenir en la decisión final de la venta, todo apunta a que será finalmente la propia Western Digital, junto con varias empresas más, quien se quede con ella.

Así lo apunta Reuters, que asegura que Western Digital ha ofrecido finalmente 17.400 millones de dólares a Toshiba por su área de chips, que el grupo nipón necesita vender para cubrir las pérdidas ocasionadas por el retraso en la construcción de dos plantas nucleares por parte de su filial estadounidense Westinghouse, lo que la ha llevado a la bancarrota.

Al parecer, una parte de la cantidad que ofrece la compañía estadounidense Western Digital será en forma de bonos convertibles. Además, no está interesada en contar con derecho a voto en la compañía una vez se haga con ella.

Western Digital no está sola en la oferta por la división de chips de Toshiba, puesto que la adquiriría junto con un consorcio, del que también forman parte la entidad estadounidense de capital riesgo KKR, así como el Banco de Desarrollo de Japón y la Red de Innovación de Japón, respaldada por el gobierno del país. Cada uno de ellos aportará unos 2.735 millones de dólares para la operación. Además, varios prestamistas actuales de Toshiba, entre los que están los bancos Mizuho y Sumitomo Mitsui, harán préstamos a Toshiba por un valor de 6.385 millones.

Además, varias empresas japonesas invertirán alrededor de 455 millones dólares en la operación. Con esto quieren asegurarse de que las empresas japonesas que participarán en la compra tengan un 60 por ciento de las acciones de la empresa. Toshiba no se deshará de todas sus acciones, puesto que se quedará con títulos por valor de algo más de 900 millones de dólares.

Si todo marcha como se espera, Toshiba espera poder alcanzar un acuerdo para la venta de su división de chips antes de finales de este mes. También desea cerrar la venta antes del final de este año fiscal, en marzo de 2018. De ahí que tenga prisa por llegar a un acuerdo antes de finalizar agosto, puesto que la obtención de la aprobación de los reguladores para la operación podría llevar unos seis meses.

Foto: Yaca2671