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Uber se lo vuelve a poner más difícil al taxi

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A medida que va pasando el tiempo, las posiciones entre Uber y taxistas no solo no se acercan, sino que parecen más enconadas que nunca. Es cierto e indudable que la beligerancia se puede ubicar de manera prácticamente exclusiva del lado del taxi (no hemos conocido casos de ataques de conductores de Uber a taxistas), pero no es menos cierto que la política de precios del servicio, cada vez más agresiva, se entiende sin duda como un torpedo dirigido claramente a la línea de flotación del sector del taxi, que se ve cada día más amenazado por esta nueva y cada vez más agresiva competencia. Y el último (de momento) paso al respecto lo hemos conocido hoy por El Confidencial, que nos cuenta sobre los cambios en la tarifa del servicio, así como un ajuste que reduce significativamente la horquilla de coste estimado de los desplazamientos, lo que acerca a Uber a ofrecer un precio casi cerrado antes de realizar el desplazamiento.

Una de las razones por las que la gente no emplea habitualmente el servicio de taxi es el desconocimiento sobre el coste que va a suponer el desplazamiento. Me ha ocurrido en muchas ocasiones, al compartir taxi con personas que no usan habitualmente el servicio, ver cómo se han sorprendido al comprobar que la «carrera» ha sido más económica de lo que esperaban. Sin embargo, la incertidumbre, sumada al desconocimiento sobre el modelo de tarificación que emplean los taxímetros, hace que los usuarios anhelen un modelo de precio fijo (como el que ya se ofrece, en Madrid, en los desplazamientos hacia y desde el aeropuerto de Barajas). Y en Uber, que son conscientes de esta circunstancia, no solo han ofrecido durante un tiempo una tarifa fija (y, además, más económica que la del taxi) en desplazamientos hacia y desde Barajas, sino que además han modificado el sistema de cálculo de coste, para ajustarlo al máximo.

Si no has empleado nunca Uber, debes saber que al solicitar un servicio, indicando tanto tu ubicación de recogida como el destino al que diriges, la app te muestra una estimación del coste que tendrá el desplazamiento, con una horquila de, por ejemplo, entre ocho y doce euros. Esto va a cambiar a partir del lunes que viene, ya que la compañía (según afirma) ha valorado la información que ha recopilado durante todo este tiempo, para afinar mucho más esta estimación, que se acercará en muchos casos a un precio definitivo. Es decir, que los usuarios de Uber podrán saber, casi al céntimo, cuánto les va a costar un desplazamiento no ya antes de realizarlo, sino incluso antes de contratarlo.

Por otra parte, la compañía también va a realizar algunas modificaciones en sus tarifas. Concretamente disminuye a la mitad de su valor actual el coste por minuto (en la tarificación por tiempo), que pasa a ser de 10 céntimos por minutos (facilitando en gran medida esa mayor aproximación al coste final, al reducir el peso en el precio total el impacto del elemento más variable del mismo). Sube 10 céntimos, sin embargo, el precio por kilómetro recorrido, que a partir del lunes que viene costará 1,25 euros. Y se eleva también el importe mínimo por trayecto, que hasta ahora se encontraba en cinco euros y que ahora pasará a ser de 5,50€. Unos cambios con los que, según afirma, la compañía pretende mejorar los ingresos para los conductores, sin que esto suponga una penalización en el precio para los usuarios.

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