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iPhone 7: insuficiente para recuperar el mercado chino

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Apple iPhone 7

Ayer fue el gran día para muchos. Apple, con la precisión de un reloj suizo, organizó su ya tradicional keynote del mes de septiembre, en la que pudimos ver muchas de la novedades con las que los de Cupertino pretenden mantener o mejorar su cuota de mercado durante los meses venideros. Y aunque fueron varias las novedades que pudimos conocer, evidentemente la estrella del evento fue el nuevo (y más que esperado) iPhone 7. Como ocurre cada año, las especulaciones habían inundado la red desde meses antes de su lanzamiento. Algunas de ellas resultaron ser reales, pero otras pillaron a los asistentes totalmente por sorpresa. Sin embargo, y aunque el auditorio presente rompió en aplausos y ovaciones constantemente durante todo el evento, la nueva versión del smartphone de Apple no parece ser suficiente para recuperar posiciones en el mercado chino, según cuenta hoy Bloomberg.

Con el lanzamiento del iPhone 6, hace ahora dos años, Apple logró convertirse en el fabricante más vendido en China, posición que mantuvo entre septiembre de 2014 y marzo de 2015, momento en el que fue adelantado por Huawei. Desde entonces, cuando su cuota de mercado era del 14% en el gigante asiático, sufrió un cierto descenso, luego volvió a subir un poco por el tirón del iPhone 6S y, desde entonces, ha descendido hasta un 8%, quedando por detrás de fabricantes nacionales como Huawei y OPPO, que ofrecen terminales de gama alta por precios más ajustados, y con algunas funciones no disponibles en los teléfonos de Apple.

Las dos claves en las que debían incidir los de Cupertino para intentar recuperar su posición de fuerza en ese mercado no se han dado. La primera es la innovación. A este respecto Jin Di, analista de IDC, opina que no hay nada de innovación en el nuevo iPhone 7, y solo algunas pequeñas mejoras. Además, no hay un significativo cambio de diseño (algo que hasta ahora sí que había ocurrido en los cambios de «generación» del smartphone), no hay nuevos colores… en resumen, no hay elementos que permitan distinguir, de un primer vistazo, que un usuario está empleando la nueva versión del teléfono de Apple, algo que muchos usuarios valoran muy positivamente.

La otra es, sin duda, el precio. El lanzamiento de los modelos 5C y SE fue un movimiento muy inteligente por parte de Apple, puesto que, junto con la política de mantener algunas versiones anteriores del iPhone en el mercado, reducían el precio de entrada para aquellos usuarios interesados en pasarse a Apple, pero no ha invertir tanto dinero en sus teléfonos. Con el iPhone 7 no se ha presentado un «hermano menor», más económico y que, por lo tanto, pueda competir en precio con los terminales de gama alta fabricados en China y que están acabando con el excelente rendimiento económico que obtenían los de Tim Cook en el país asiático.

Es cierto, a este respecto, que bastantes voces apuntan a que el año que viene, entre el primer y el segundo trimestre, Apple celebrará los diez años del iPhone con una nueva edición del mismo, en la línea de prestaciones y precio del iPhone SE. Sin embargo, al no haberlo presentado en esta keynote, se pierden el cuarto trimestre del año, que tradicionalmente es el mejor en ventas. No obstante, es posible que consideren que el iPhone 7 tendrá un efecto similar al del 6S, ayudándoles a situarse de nuevo por encima del 10% en la cuota de mercado y adelantando a OPPO, y que para principios-mitades de 2017, cuando ese efecto empiece a descender, ese nuevo esperado iPhone «intermedio», les permita salvar la previsible caída.

El problema es que, aún con las mejoras de rendimiento, de su cámara y las funciones relacionadas, de pantalla, de sonido y con los atractivos auriculares inalámbricos (que, recordemos, se venden por separado por 179 euros), la sensación de que el iPhone 7 no es tan innovador como cabría esperar y desear. Y es cierto que resulta complicado ser profundamente innovador todos los años, pero en esta ocasión, parece que se han quedado demasiado cortos. Quizá haya que esperar a la versión 7S, que veremos el año que viene por estas fechas, para volver a sorprendernos con algo realmente innovador. Y yo, sinceramente, lo espero, pues Apple me ha malacostumbrado a dejarme con la boca abierta con muchos de sus productos, y eso es algo que ayer, tristemente, eché un poco de menos.

 

Imagen: Apple

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