Para DreamWorks Animation, la computación de alto rendimiento es crítica, por lo que confía en su centro de datos para conseguir el máximo rendimiento en la creación de sus películas. Pero hace unos meses se toparon con un problema. Su centro de datos ya tenía 22 años, lo que les llevaba a sufrir desde problemas de espacio hasta restricciones de energía. Necesitaban tecnología que proporcionarse más eficiencia en el mismo espacio para seguir a la vanguardia de la tecnología de animación de su sector.
Por eso, para actualizarlo y renovarlo recurrieron a Lenovo, que entre otras cosas cuenta con un sistema de refrigeración líquida de última generación, Neptune Liquid Cooling, que unido a un cluster de computación de alto rendimiento podía conseguir un aumento de la potencia que conseguían en el centro de datos existente tan notable que podían llegar a multiplicarla por cien.
Ya desde las primeras reuniones, Lenovo tuvo claro que DreamWorks necesitaba un partner que apoyase sus necesidades, desde la entrega de componentes hasta los ajustes in situ a los posteriores a la instalación. Todo con oportunidades para aprender de unos de otros y de experimentar a lo largo del proceso.
Los cambios en el centro de datos llevaron a una mejora en los flujos de trabajo, lo que permite a los artistas más interactividad y más posibilidades debido a la mayor potencia conseguida. Para ello Lenovo dio forma a un nuevo centro de datos con lo último en tecnologia, desde hardware a prueba de terremotos hasta sistemas de tratamiento de agua.
La comunicación y colaboración constante permitió incluso reaccionar con rapidez ante cambios de última hora. Por ejemplo, de cara a la ubicación de las mangueras de refrigeración líquida con respecto a los racks. También hubo espacio para innovar. Por ejemplo, cuando aparecieron problemas de firmware, Lenovo inventó un proceso que permitía que las fuentes de alimentación pudiesen sustituirse con el cluster todavía en funcionamiento, lo que eliminó el tiempo de desconexión.
Menos de una semana después de encenderse, los nuevos sistemas estaban ya renderizando trabajos de producción. DreamWorks consiguió un aumento del rendimiento del 20% con el cluster con Neptune comparado con los servidores con refrigeración por aire en su granja de renderizado. Esto se debe en parte a la tecnología de refrigeración líquida que mitigaba la aceleración causada por el sobrecalentamiento.
Desde entonces, el sistema ha sobrevivido incluso a un fuego que causó un breve apagón en el centro de datos el pasado mes de septiembre. Cuando volvió la luz, ni uno solo de los nuevos servidores habían fallado. El equipo de Lenovo que trabajó en él no solo proporcionó a DreamWorks una tecnología potente. También mucha experiencia y escucha a todos los niveles, tanto en persona como online. El resultado: un centro de datos de última tecnología, con refrigeración avanzada y una notable mejora de rendimiento.