Según un estudio de Lenovo e Intel, que lleva por título «Empower your employees with the right technology», el impacto que tiene la tecnología en cómo desempeñan los empleados su trabajo y en su relación en general con la empresa para la que trabajan es mucho más fuerte de lo previsto. Tanto, que puede tener una relación directa con la productividad.
Así ha quedado demostrado también en entornos de trabajo remotos e híbridos, que son los que están utilizando actualmente multitud de empresas. Eso sí, aunque el ROI en la experiencia de los empleados se quintuplica, por un aumento de la productividad y una mayor agilidad en la organización y la satisfacción de los clientes; los responsables de TI y los empleados no se ponen de acuerdo sobre las prioridades en materia de tecnología.
Los departamentos de TI dan más prioridad a la integración informática estratégica y al software. Pero los empleados están más enfocados a la experiencia que tienen a diario con la tecnología. Esto da pie a una mejora en la colaboración entre los responsables de departamentos y los empleados en lo que se refiere a las decisiones sobre compra de tecnología en la mejora de conexión entre los equipos de trabajo. Esto llevará, sin duda, a que los clientes estén más satisfechos y como consecuencia suban los beneficios.
Los equipos, el software y los servicios que utilizan los empleados están mejorando ahora que las empresas están más centradas en el teletrabajo o en el marco de trabajo híbrido (parte en remoto y parte presencial). Los departamentos de IT están realizando este tipo de mejoras para optimizar la experiencia de los empleados y que los equipos de trabajo estén más satisfechos e interconectados. Eso sí, esto ha llevado a un mayor gasto en tecnología, compensado también en muchos casos con el aumento del ROI mencionado. Esto ha hecho que muchos ya tengan planes de seguir aumentando la inversión a dos años vista hasta casi un 25%.
Pero no todo es de color de rosa en la experiencia de los empleados con la tecnología que tienen a su alcance para desempeñar su labor. Sobre todo, están frustrados con su experiencia con el hardware y el software de sus ordenadores. En concreto, la mitad de los que han participado en la encuesta utilizada como base para el estudio ha señalado que sus equipos son anticuados o no tienen las prestaciones suficientes y son más lentos y menos potentes y fiables de lo que necesitan. Otro 46% aseguró que el software interrumpía sus tareas y fallaba a menudo.
Mientras, únicamente un 33% dijo que estaba contento con su equipo portátil de empresa, y un 30% apuntó que su portátil funcionaba bien cuando realiza tareas de colaboración con sus compañeros. En otro orden de cosas, tanto los departamentos de TI valoran la satisfacción de la tecnología como un objetivo clave. Esta tiene también un impacto positivo, ya que casi el 60% de los departamentos de TI observan un aumento de más del 10% en las puntuaciones de la experiencia de empleado cuando están más satisfechos con la tecnología.
Pero hay diversas divergencias entre los empleados y los departamentos de TI en este aspecto. Para estos, la principal preocupación es la longevidad de las inversiones en tecnología, por encima de la motivación de los equipos. Además, aunque el 84% de los departamentos de TI cree que los empleados puede cambiar entre dispositivos con facilidad cuando hay que cambiar su PC, la realidad es que solo el 50% de empleados creen que es una solución disponible.
Eso sí, tanto departamentos de TI como empleados coinciden en que los ciclos de renovación de equipos podrían mejorar. Aparte de esto, los departamentos de TI creen que si se integra el hardware y el software se tendrá un impacto mayor en la experiencia de empleados. A estos, mientras tanto, les basta con tener equipos que funcionen consistentemente.
El estudio también ofrece algunas recomendaciones a los gestores de empresa que quieran mejorar la conexión de sus empleados y también los resultados operativos acometiendo inversiones en tecnología: realinear las inversiones para centrarse en lo necesario y en las prioridades de los empleados y no necesariamente en las nuevas tecnologías, reorganizar las prioridades, centrar la inversión en los PCs, involucrara a los empleados en las decisiones relacionadas con la inversión en ordenadores.
Según Christian Teismann, Presidente del Grupo de negocio de PCs y dispositivos inteligentes comerciales de Lenovo, «este nuevo estudio ha reafirmado nuestra confianza en la importancia estratégica de la tecnología como una inversión crítica y no solo como un simple coste de transacción. El beneficio que puede aportar un despliegue correcto de la tecnología es varias veces superior al gasto inicial de las nuevas oportunidades y modelos de negocio. Dado que los empleados representan el principal activo de la compañía, el estudio identifica oportunidades para mejorar el rendimiento de la inversión en tecnología al centrarla en dispositivos informáticos y herramientas de colaboración, al tiempo que se hace partícipes a los empleados de las decisiones de compra. En el actual entorno laboral remoto e híbrido, estos pasos resultan esenciales para las empresas a la hora de desbloquear oportunidades que van más allá de la inversión inicial en tecnología».