Frente al mundo de la híper especialización, en el que cada objeto debe tener una función concreta y específica, a menudo se echan de menos más dispositivos multipropósito. Lenovo ha tomado buena nota de ello y en su catálogo pueden encontrarse, entre ordenadores y tablets con clara vocación empresarial y los diseñados para el ocio personal, modelos que pueden emplearse en todo tipo de tareas. Un buen ejemplo es Lenovo Tablet 10, una tableta diseñada para tener contentos tanto a los usuarios particulares como a los profesionales. Y, sobre todo, para que los empleados de cualquier empresa, por pequeña que sea, puedan usar este tipo de dispositivos.
La parte relacionada con la seguridad está muy cuidada, algo que siempre hay que tener en cuenta a nivel corporativo. Además de todas las funciones que ofrece por defecto el sistema operativo (hasta Windows 10 Pro), como el cifrado Bitlocker, también está protegido por un chip TPM independiente, dispone de ranura Kensington, lector de huellas opcional y puede adquirirse con fundas que ofrecen distintos niveles de protección. Hay incluso un modelo sellado que cuenta con certificación IP65 También dispone de un teclado opcional.
El hecho de contar con procesadores Intel Celeron N4100 garantiza un rendimiento suficiente y, sobre todo, un precio bastante ajustado. Equipado con 4 o con 8 GB de memoria, dispone de hasta 128GB de almacenamiento eMMC
Lenovo Tablet 10 dispone de una pantalla WUXGA IPS de 10,1» con una resolución de 1.920 x 1.200 píxeles. En cuanto a las conexiones, tiene puertos USB tipo C y USB 3.0 tipo A, salida de vídeo HDMI y lector de tarjetas microSD, así como WiFi AC, bluetooth 4.2 y LTE para conectarte allá donde vayas. La batería tiene una autonomía estimada por el fabricante de casi 10 horas, sus medidas son 26,1 x 1,06 x 17,8 cm y tiene un peso de 664 gramos. Por último, el lápiz digital opcional Lenovo Active Pen permite, añadir notas e introducir información con facilidad en el equipo.