Scott Fahlman, el experto en redes neuronales que creó los emoticonos

Ya desde la proliferación del correo electrónico y los mensajes SMS, uno de los principales reproches que se podían escuchar sobre esos nuevos sistemas de comunicación era que, ante la pérdida de muchos de los elementos que componen la comunicación entre personas «en vivo» (tono de voz, gestos, etcétera), era muy fácil malinterpretar el significado de los mensajes. Y es que el sarcasmo, las bromas y otros muchos modos de comunicación, necesitan de dichos elementos para ser correctamente entendidos por sus receptores.

Así, ante ese problema, que ya se experimentaba en los primeros tiempos de Usenet y las BBS (solo los que peinan canas sabrán de qué estoy hablando), Scott Fahlman propuso, a principios de los 80, la utilización de dos elementos gráficos para distinguir cuándo un texto era en broma, y cuándo era en serio. En concreto, esos elementos gráficos debían basarse en caracteres estándar del ASCII, y ser fácilmente interpretables por quienes los recibían, especialmente antes de que alcanzaran la difusión necesaria para ser entendidos por cualquier usuario.

¿Y qué propuso? Esta es una reproducción de su mensaje, extraída de Wikipedia:

Este es el mensaje original y su traducción:

19-Sep-82 11:44    Scott E  Fahlman             :-)
From: Scott E  Fahlman <Fahlman at Cmu-20c>

I propose that the following character sequence for joke markers:

:-)

Read it sideways.  Actually, it is probably more economical to mark
things that are NOT jokes, given current trends.  For this, use

:-(

O, traducido

19-Sep-82 11:44    Scott E  Fahlman             :-)
From: Scott E  Fahlman <Fahlman at Cmu-20c>

Propongo la siguiente secuencia de caracteres para marcar bromas:

:-)

Léase de lado. En realidad, es probable que sea más económico marcar

cosas que NO sean bromas, dadas las tendencias actuales. Para esto, úsese: :-(

Así, sin saberlo, Scott Fahlman sentó, el 19 de septiembre de 1982, las bases de un complemento a los mensajes de texto que, con el tiempo, se ha convertido en un elemento de uso más que común en este tipo de mensajes, tanto de los canales que ya existían en aquel momento, como de los que han llegado a posteriori. Y que, más tarde, dieron lugar a los ahora más que habituales emojis, que incluso son empleados como alternativas a las palabras (en las últimas versiones de iOS, al escribir determinadas palabras el autocorrector te propone usar un icono en su lugar). Desde ese primer mensaje, a principios de los 80, el listado de los emoticonos no ha dejado de crecer, e incluso a día de hoy siguen desarrollándose nuevas ideas al respecto.

Fahlman, que será recordado siempre por esta creación, es en realidad ingeniero informático por la Universidad Carnegie Mellon (una de las más prestigiosas de Estados Unidos), y durante su carrera profesional realizó grandes aportaciones en el desarrollo de las bases de algunos de los sistemas empleados actualmente en inteligencia artificial. ¿Quién le iba a decir que, con un mensaje como ese, crearía uno de los elementos de comunicación más empleados décadas después?

Imagen: Scott E. Fahlman’s wife