Conecta con nosotros

A Fondo

IPv6, el estándar de la nueva Internet

Publicado el

Aunque en MuyComputerPRO hemos hablado largo y tendido de este estándar, no está de más refrescar conceptos. Eso es lo que hacemos en este especial. basado en la información técnica de STRATO.

IPv6 resuelve muchos de los problemas del actual protocolo IPv4, sobre todo el de la escasez, cada vez mayor, de direcciones. Cada aparato conectado a Internet necesita una dirección IP. Con las actuales series de cifras de cuatro bytes del estándar IPv4 se pueden formar alrededor de 4.000 millones de direcciones. A pesar de que, durante la introducción de este sistema, hace casi treinta años, se vio como algo seguro para el futuro, ahora, en el año 2010, está llegando al límite de su capacidad.

 

Los expertos esperan que a partir del año 2011 no haya más bloques de direcciones disponibles en todo el mundo, sino sólo direcciones sueltas. Y, sin direcciones adicionales es imposible que Internet siga creciendo. Por lo tanto, el relevo del estándar IPv4 no es sólo urgentemente necesario, sino que de hecho, ya está en marcha. Especialmente en Asia y Estados Unidos el cambio se está produciendo de manera masiva; hasta ahora Europa ha actuado de manera más moderada.

 

Número de direcciones posibles (redondeado):

 

IPv4 4.000.000.000
IPv6 340.000.000.000.000.000.000.000.000.000.000.000.000
 

De este modo, con el protocolo IPv6 se abren numerosas nuevas posibilidades: con las series de cifras de 16 bytes se pueden formar alrededor de 340 sextillones de direcciones. Sólo con esa capacidad, se pueden realizar grandes planes futuros en base a Internet, como la gestión de edificios integrada, la conexión inteligente en el terreno nacional, o la utilización masiva de Internet móvil.

 

Esta ampliación de direcciones será beneficiosa para aplicaciones como la telefonía a través de Internet, y para asentar y ampliar el uso de la televisión interactiva a través de la Red. Además, más adelante, muchos objetos cotidianos estarán conectados permanentemente a Internet para intercambiar informaciones entre sí de manera independiente. En un periodo de transición de a lo mejor 10 años, existirán los dos estándares en paralelo, aunque IPv4 e IPv6 están lógicamente separados el uno del otro.

 

Las ventajas para usuarios privados

 

En la red nacional, los usuarios disfrutarán considerablemente de las ventajas del estándar IPv6. Técnicas que aún hoy son comunes, como Network Address Translation (NAT), ya no serán necesarias. NAT conecta una red local, que utiliza direcciones IP privadas a través de una dirección IP pública, con Internet. Este tipo de conexión frena aún numerosas aplicaciones y servicios que podrían desarrollarse. En el futuro, los usuarios adjudicarán a cualquier aparato o dispositivo local una dirección IPv6 y con ello, podrán establecer una conexión permanente y directa con Internet.

 

De este modo, dispositivos y equipos como grabadoras de disco duro digitales estarán siempre disponibles. Una conexión directa a Internet con IPv6 conlleva también numerosas ventajas para servicios como redes privadas virtuales (VPN), Mensajería Instantánea o Voz a través de Internet (VoIP). Estos servicios alcanzan su máximo rendimiento sólo con una conexión Peer-to-Peer, muy fácil de realizar con el nuevo estándar. La “Quality of Service“ (QoS) permite, por ejemplo, priorizar paquetes de datos concretos, lo que es fundamental para una aplicación con contenidos de velocidad crítica como, por ejemplo, las conversación telefónicas por VoIP. Además, a través de IPsec, IPv6 ofrece una encriptación segura de punta a punta.


 

IPv6 ofrece también nuevas posibilidades para las aplicaciones móviles que tendrán una gran expansión en los próximos años: la ampliación Mobile IPv6 se encargará de que los propios teléfonos móviles estén constantemente disponibles y conectados a través de la misma dirección IP. De este modo, por ejemplo, se pueden desviar las llamadas que llegan al número fijo a un móvil por VoIP, que puede estar siempre on-line con una tarifa plana económica. La condición para ello, es la compatibilidad con IPv6 de los futuros dispositivos móviles.

Gestionar la propia red no conectada al mundo exterior con direcciones IPv6 hoy mismo ya no es ningún problema. De este modo, los usuarios pueden empezar a utilizar y probar la nueva tecnología aunque, de momento, la conexión con el mundo exterior se podrá seguir produciendo a través de una dirección IPv4. Una solución: el protocolo Teredo desarrollado por Microsoft y soportado por Windows XP, por ejemplo, permite el uso de IPv6 a través de IPv4. En Internet están disponibles distintos servidores Teredo públicos para ambas partes. Pero, como con esta solución, se evita NAT y el correspondiente cortafuegos, los ordenadores internos están conectados a Internet de forma no segura, y es el propio usuario quien debe encargarse de esa seguridad adicional a través de un cortafuegos compatible con IPv6.

 

Su aplicación en las empresas

En las empresas, la necesidad de un cambio a IPv6 es evidente cuando, por ejemplo, el CEO está de viaje en Asia, y necesita informaciones actualizadas constantemente, conectarse a la intranet de su compañía, o acceder a su correo electrónico. Como Asia gestiona ya gran parte de Internet exclusivamente con el estándar IPv6 (porque en el reparto de las direcciones IPv4 el continente sólo recibió una parte de los recursos que utilizan América y Europa), si el CEO se registra en la Red IPv6 de un proveedor asiático, no tendrá acceso a los ordenadores de su empresa conectados a través de IPv4.

Si la empresa pasa a IPv6 para resolver esta problemática, podrá disfrutar a la vez de una mayor seguridad en comparación con el estándar IPv4. A causa del largo de las direcciones, los posibles atacantes deben dedicar un mayor esfuerzo a escanear completamente las subredes y detectar ordenadores activos. Además, el gran número de direcciones disponibles hace que sea posible adjudicar a todos los clientes conectados a la red una dirección IP fija permanente.

 

Ya no es necesaria una conexión a través de NAT, como es habitual en la actualidad, con IPv4. IPv6 proporciona, junto con el protocolo de seguridad IPsec, el logro de uno de los objetivos iniciales de Internet, la seguridad general directamente de cliente a cliente. IPsec protege los datos durante la transmisión. Con una aplicación de cortafuegos adicional en el cliente correspondiente y routers especiales para IPv6 se alcanza un estándar de seguridad muy elevado.

 

 IPv6, mucho más que un protocolo de Internet

 

IPv4, al límite de su capacidad

Lo más leído