Microsoft apuesta por la inteligencia artificial y crea un grupo de investigación

La apuesta por la inteligencia artificial está cada  vez más clara. Y es que un campo del desarrollo tecnológico que, hasta hace poco tiempo, solo interesaba a una minoría, se ha convertido ahora en un objetivo prioritario de las principales empresas tecnológicas. Estas, de un tiempo a esta parte, no dejan de realizar inversiones y poner en marcha proyectos y servicios relacionados con este campo, y especialmente con las posibilidades que ofrece gracias a Big Data y machine learning. El último ejemplo de ello, según informa la Agencia Reuters, es la creación, por parte de Microsoft, de una nueva unidad de trabajo e investigación dedicada a la inteligencia artificial.

El nuevo grupo de trabajo, denominado Microsoft AI and Research Group, será dirigido por Harry Shum, un veterano en Redmond y que ya ha sido responsable de otras áreas de investigación y desarrollo de la compañía, como por ejemplo la asociada con su buscador Bing. La inteligencia artificial no es algo nuevo para los padres de Windows. Según palabras de Shum «Microsoft ha estado trabajando en el campo de la inteligencia artificial desde que la empresa desarrolla programas de investigación, y hasta el momento solo hemos rascado la superficie de todo lo que es posible».

El interés de Microsoft por esta tecnología ha quedado más que patente durante el último año.  Y es que, a la creación de este nuevo equipo, se suma el acuerdo firmado esta semana con Amazon, Google, Facebook e IBM para crear una fundación destinada a difundir públicamente el funcionamiento y las posibilidades que ofrece. Por otra parte, también este mismo año ha realizado varias adquisiciones relacionadas con este campo.

Por una parte, en febrero se hizo con SwiftKey, un sistema de teclado predictivo para smartphones que «aprende» de la escritura de sus usuarios. Más recientemente ha comprado Genee, un servicio online (basado en IA) de planificación. Y, aunque con un resultado bastante peor del previsto, lanzó a principios de año un bot en Twitter que aprendería de los usuarios de la red social. Desgraciadamente el aprendizaje (en buena parte, por los propios usuarios del servicio) hizo que Tay (este era su nombre) empezará a dar respuestas racistas y sexistas, por lo que tuvo que ser desactivado por Microsoft.