HPC e Inteligencia Artificial, objetivos clave para HPE

Que tanto la computación de alto rendimiento (HPC) como la Inteligencia Artificial, con su plétora de usos potenciales, son dos tecnologías de vital importancia para Hewlett Packard Enterprise no es una sorpresa. En realidad, ya hablamos de dicha relación hace algunas semanas, y hoy HPE hace pública una nueva generación de sistemas, software y servicios centrados, precisamente, en estos dos campos tan importantes actualmente dentro del sector tecnológico, y tan relacionados con la transformación digital. Concretamente, el catálogo de la compañía se actualiza con los nuevos sistemas HPE Apollo 6000 Gen10, HPE SGI 8600 y HPE Apollo 10 Series.

En el diseño de todos ellos se han tenido muy en cuenta las necesidades concretas de las infraestructuras que van a desarrollar operaciones relacionadas con la Inteligencia Artificial, y que, por lo tanto, deben ser capaces de procesar un gigantesco volumen de datos, extraer conclusiones a partir de las mismas y, lo que es todavía más importante, ser capaces de modificar sus «criterios» en función a la experiencia, en un proceso de aprendizaje continuo mediante Machine Learning o, más recientemene, de Deep Learning.

Y también, sin duda, HPE apuesta por la computación de alto rendimiento, es decir, por la creación de infraestructuras capaces de procesar enormes volúmenes de datos, y su empleo para realizar simulaciones de gran valor en muchos campos de la ciencia, la ingeniería y el desarrollo empresarial.

Hablamos, para que se entienda, de operaciones de cálculo que, en sistemas convencionales, podrían llevar centenares (o incluso miles) de años y que, por lo tanto, hasta ahora eran inasumibles. Sin embargo, gracias a los avances en HPC, estas megainfraestructuras sí que son capaces de resolver esas complejas tareas en unos tiempos razonables, abriendo grandes puertas a avances en todos estos campos.

«En la actualidad, los requisitos de HPC en los clientes van más allá de un rendimiento y de una eficiencia superiores», en palabras de Bill Mannel, vicepresidente y director general de la división de Soluciones para HPC y AI en Hewlett Packard Enterprise, que también añade: «Los clientes también tienen cada vez más en cuenta la seguridad, la agilidad y el control de los costes.  Con el anuncio de hoy, nos ocupamos de todas estas consideraciones y ofrecemos unos sistemas optimizados, gestión de la infraestructura y servicios para proporcionar una nueva experiencia informática». Así, las nuevas soluciones de HPE, aunque ofrecen un rendimiento muy mejorado, no dejan de lado otros aspectos clave como la fiabilidad, la escalabilidad y, por supuesto, la seguridad.

HPE SGI 8600

Se trata de un sistema petascale con refrigeración líquida, construido en base a la arquitectura SGI ICE (la primera solución diseñada conjuntamente con las tecnologías de ambas empresas, tras la adquisición de SGI por parte de HPE), y que permite el proceso masivo de datos (HPC) para afrontar operaciones de cálculo y simulación de gran escala. Esto lo convierte en una solución idónea para cargas de trabajo que exijan un alto rendimiento de procesamiento en paralelo (actualmente es la solución más rápida a este respecto).

Además, gracias a la tecnología hypercube, es posible escalar la infraestructura a incluso más de 10.000 nodos sin la necesidad de emplear switches adicionales, que puedan hacer más compleja la operación de escalado. De esta manera, se puede partir de una solución de tamaño intermedio y, con el tiempo, ir dotándola de más nodos para adecuarla a las necesidades concretas de las operaciones que el sistema deba asumir en cada momento.

HPE Apollo 6000 Gen10

En este caso hablamos de una solución de la familia de grandes sistemas con refrigeración por aire, con una capacidad de superar los 300 teraflops por bastidor (rack), lo que lo convierte en una solución ideal para empresas con necesidad de un sistema HPC que ofrezca una adecuada relación calidad/precio, y que además emplea la tecnología Silicon root of trust, que garantiza la seguridad de los sistemas frente a las principales amenazas a los que se enfrentan.

Para garantizar un alto rendimiento se han reducido la latencia y el tiempo de respuesta, con el fin de acelerar el rendimiento en las operaciones de entrada y salida del sistema. Además, este rendimiento no supone una lacra en lo referido al consumo de energía, gracias a la optimización de su diseño y de los complejos sistemas de refrigeración que necesitan estas infraestructuras que han logrado reducir de manera importante el consumo con respecto a otras soluciones similares.

Serie HPE Apollo 10

Pero no todo son soluciones HPC. Con esta serie de sistemas, HPE da una solución sencilla tanto en su puesta en marcha como en su gestión, pero que proporciona todo lo necesario a aquellas empresas que empiezan a tener necesidades de proceso relacionadas con Deep Learning e Inteligencia Artificial. Con esta completa familia de servidores, cada empresa puede encontrar un sistema que se adapte a sus necesidades concretas, realizando una inversión que se adecue perfectamente a su presupuesto, y que al tiempo ofrecen el rendimiento necesario para satisfacer sus necesidades.

Por ejemplo, el sistema HPE Apollo sx40 Gen10 es un servidor de 1U con dos procesadores Intel® Xeon® de última generación con soporte para hasta cuatro GPU NVIDIA Tesla SXM2 con NVLink.  Por su parte, el sistema HPE Apollo pc40 Gen10 es un servidor con factor de forma 1U con hasta dos procesadores Intel® Xeon® y con soporte para hasta cuatro tarjetas GPU PCIe. Así, cada empresa puede encontrar una solución concreta que se adapte a lo que está buscando, y que le permita dar sus primeros pasos en el campo de la Inteligencia Artificial.