AWS pone la nube en el futuro del motor

La tecnología y el motor son dos mundos que siempre han estado íntimamente relacionados, si bien es durante estos últimos años cuando la conexión ha sido más evidente, algo que sin duda podemos achacar a la electrónica. Ya sea para mejorar la eficiencia del combustible, ofrecer un mayor nivel de confort o permitir nuevas formas de movilidad, la tecnología se ha convertido en un elemento clave para llevar al sector del automóvil a nuevos límites.

Con el auge de la digitalización, los fabricantes han empezado a adoptar una amplia gama de tecnologías para mejorar sus vehículos. Desde sistemas de información y entretenimiento avanzados hasta sensores que permiten detectar problemas en el motor antes de que se produzcan, algo que eleva el nivel de seguridad de la conducción de manera exponencial, por no olvidar la comodidad, la fiabilidad y la eficiencia energética.

Los fabricantes también están explorando formas innovadoras de usar la tecnología para mejorar el rendimiento de los coches. Esto incluye desarrollos como el uso de motores híbridos y eléctricos, así como la implementación de sistemas inteligentes que permiten a los vehículos adaptarse automáticamente a las condiciones del tráfico. Estas soluciones tienen un gran potencial para mejorar significativamente la experiencia del conductor (que en un futuro cada vez más cercano pasará a ser un pasajero más) y reducir el consumo de combustible, sea este de origen fósil, electricidad, hidrógeno o lo que esté por venir.

Estos procesos evolutivos son, eso sí, cada vez más complejos. Desde la gestión de unas cadenas de suministros gigantescas hasta la integración de sistemas, los fabricantes deben enfrentarse a una sucesión constante de desafíos, novedades, regulaciones e imprevistos que no deben incidir ni en su capacidad de producción ni en la calidad del producto final. 

¿Y qué tienen que ver la nube y AWS en este complejo proceso? Pues la respuesta la encontramos en AWS Automotive, una división de negocio de Amazon Web Services que vio la luz hace poco más de un año, durante el AWS:reInvent de 2021, y que en este corto periodo de tiempo ya ha sabido consolidarse como una propuesta de enorme valor para un sector tan complejo como lo es el de la automoción, al punto de que en este tiempo sus servicios ya han servido para marcar una importante diferencia para un buen número de  fabricantes.

¿Qué es Amazon Web Services?

Para aquellos que todavía no conozcan la propuesta de Amazon en lo referido a la nube, empecemos recordando que Amazon Web Services (AWS) es una plataforma de servicios en la nube que ofrece una amplia gama de herramientas y recursos para empresas y desarrolladores de software. Fundada en 2006 por Amazon, AWS ha crecido hasta convertirse en el proveedor líder de servicios en la nube en todo el mundo, gracias a su amplia y muy afinada selección de servicios.

Una de las grandes ventajas de AWS es su capacidad para proporcionar una infraestructura de TI escalable y de alta disponibilidad para empresas de todos los tamaños, desde pequeñas startups hasta grandes corporaciones. Los usuarios pueden elegir entre una variedad de modelos de precios flexibles, incluyendo pagos por uso y contratos de reserva, lo que permite a los usuarios pagar solo por los recursos que utilizan y reducir los costos operativos en comparación con los modelos de infraestructura tradicionales.

Esto, en el contexto del sector automotriz, ha llevado a que cada vez sean más los fabricantes que han encontrado en los servicios de AWS las soluciones que necesitaban y que se adaptan a sus procesos. Esto ha ganado especial visibilidad los últimos tiempos, debido a la apuesta de la FIA por emplear AWS para mejorar el mundial de Formula-1 en múltiples aspectos, desde la analítica avanzada de datos hasta múltiples mejoras en la experiencia de su audiencia.

En un marco más concreto, el de la colaboración entre AWS y Ferrari, que trasciende de la presencia del Cavallino Rampante en el mundial para alcanzar toda la operativa del icónico fabricante de Maranello, esto es lo que afirma Mattia Binotto, exdirector del equipo de la Scuderia Ferrari:

“Ferrari y AWS representan la excelencia en sus campos. Como nuestro proveedor oficial de la nube, creo firmemente que AWS permitirá que nuestra empresa se convierta en una organización basada en datos que utiliza el poder de la tecnología para mejorar nuestros productos, aumentar el compromiso con los entusiastas de Ferrari en todo el mundo y ofrecer experiencias de conducción cada vez más emocionantes”.

AWS Automotive

Hablar de vehículos y de la nube hace que muchas personas piensen, en primera instancia, en los servicios que ofrecen cada vez más vehículos y que requieren de una conexión a Internet. Desde sistemas de conducción autónoma hasta información en tiempo real sobre el estado del tráfico o funciones para alertar en caso de averías, emergencias, etcétera. Es decir, como indicaba anteriormente, la parte más directamente relacionada con la experiencia de usuario de sus conductores y pasajeros, pero lo cierto es que la conexión va mucho más allá.

Para tener una visión mucho más amplia de lo que AWS Automotive puede ofrecer a esta industria, pudimos hablar durante el AWS re:Invent 2022 con Wendy Bauer, General Manager de AWS Automotive & Manufacturing, una profesional que combina experiencia tanto en el sector tecnológico como en el automotriz, por lo que cuenta con una visión especialmente privilegiada sobre la creciente intersección entre ambos sectores, a lo que, tras haber hablado con ella, debemos sumar también una gran visión de futuro sobre esta convergencia llamada a reinventar por completo el sector de la automoción durante los próximos años.

Como contaba anteriormente, AWS Automotive cumplió su primer año el pasado mes de noviembre, pero lo cierto es que la compañía, con Bauer a la cabeza en este particular desafío, ya llevaban mucho tiempo trabajando en componer una propuesta sólida y adaptada a las necesidades de este sector. Es decir, que AWS empezó a dar servicio a este sector tiempo antes de que se constituyera esta división,si bien el nacimiento de la misma ha servido para para aglutinar todas las propuestas que tienen especial encaje en el sector y, lo que aún más importante, para desarrollar una estrategia destinada específicamente al mismo.

Wendy Bauer, General Manager de AWS Automotive & Manufacturing.

La puesta en marcha de AWS Automotive es, al tiempo, la recopilación de un aprendizaje de varios años y una mirada al presente y al futuro del sector, así es como nos lo contó Bauer:

“En los últimos años hemos estado pensando, invirtiendo y trabajando para entender la industria del automóvil. Y eso comienza con la comprensión de lo que es la disrupción. ¿Cuáles son los retos a los que se enfrentan nuestros clientes y el sector? ¿Qué significa eso para su negocio? Por ejemplo, cuando piensan en sus retos, en los problemas y en la disrupción. ¿Cómo piensan que afectará a sus empleados, a sus modelos de negocio, a sus clientes? Así que siempre trabajamos para asegurarnos de que entendemos y pensamos profundamente en la disrupción y lo que significa para su negocio. Y, a partir de ahí, nos centramos en cómo podemos aportar las capacidades y propuestas de AWS, junto con nuestras empresas asociadas, para trabajar con nuestros clientes y definir y optimizar las soluciones que mejor se adapten a sus necesidades y que mejor aborden sus problemas.”

Aquí, además de aprender sobre la gestación y puesta en marcha de AWS Automotive, nos encontramos con un aspecto clave, y es que el cliente final de los fabricantes también está muy presente en el modelo definido por AWS para el sector. Y puede parecer baladí, pero no lo es en absoluto, ya que proporcionar a los fabricantes las herramientas necesarias (o al menos el sustrato tecnológico necesario para que las puedan desarrollar) forma parte esencial de los objetivos de estas empresas, pues de ello depende de una manera vital su actividad comercial.

Fruto del análisis en profundidad, se detectaron tres macrotendencias a las que era necesario dar una respuesta:

• Experiencia de usuario personalizada: este punto de la conversación resultó particularmente revelador e interesante gracias a una comparación, compartida por Bauer, y que ayuda a entender mejor de qué estamos hablando exactamente: “Como un smartphone. Así, los clientes buscan actualizaciones de características y nuevas capacidades de software y que el vehículo sea personalizado hacia nuestras necesidades y deseos y preferencias. Y no sólo dentro del coche, sino a lo largo de todo el ciclo de vida, desde el proceso de compra, de los servicios que empleamos en el coche y cómo nos sentimos cuando estamos en su interior”.
• Tecnología: en este punto hablamos de las innovaciones tecnológicas directamente relacionadas con el mundo del motor. vehículos conectados, conducción autónoma, electrificación, vehículos definidos por software (de los que hablaremos más adelante). Unos desarrollos en los que la conectividad, la potencia de cómputo, la gestión de ingentes volúmenes de datos, el aprendizaje automático y otras muchas tecnologías juegan un papel clave.
• Sostenibilidad: la optimización de procesos es un elemento clave para la sostenibilidad. Así, desde una gestión avanzada de la cadena de suministros hasta las analíticas de procesos para su mejora marcan una gran diferencia en este punto.

Vehículos definidos por software

En este punto de la conversación, es decir, cuando se mencionaron los software defined vehicles, me pareció que sería especialmente interesante pedirle a Bauer una definición sobre esta tendencia, que ya hemos visto en otras áreas del sector tecnológico en el pasado (como con las infraestructuras definidas por software):

“En primer lugar, en un vehículo totalmente definido por software, se abstraen las funciones en el software que define las funciones del hardware, separándolas. Así que el hardware y el software se actualizan por separado.

En segundo lugar, cuando se piensa en las funciones y aplicaciones en el coche, la forma de diseñar esas aplicaciones es con un enfoque basado en microservicios. De este modo podrás seguir actualizándolas utilizando ese enfoque, que se relaciona con la forma de diseñar el software, su complejidad, el tiempo necesario para desarrollarlo e iterar continuamente… Así que es un enfoque basado en microservicios y desarrollo de software y características.

El tercer punto es que el vehículo debe tener capacidad de actualición OTA. Es decir, los ingenieros siguen desarrollando nuevas características y nuevas actualizaciones de las características […]y la actualización continua. Claro, si uno piensa en ir desde el coche conectado de hoy, a esta visión futura de un vehículo definido por software, se puede imaginar que hay muchos problemas que resolver.”

Esto es muy interesante, pues nos lleva de nuevo a la analogía con el smartphone y otros tantos dispositivos de electrónica de consumo, en los que el modelo definido por software es una realidad presente desde hace ya mucho tiempo. Llevar este modelo a los vehículos es, sin duda, mucho más complejo, pero todas las perspectivas apuntan a que es el futuro del motor y, por lo tanto, es un camino que muchos fabricantes ya han empezado a transitar, y para el que la colaboración con plataformas como AWS puede marcar una gran diferencia.

Future, faster, together

De toda la más que interesante conversación con Bauer hubo algo en particular, tres palabras, que empleó para definir la filosofía de AWS Automotive: future, faster, together, futuro, rapidez, juntos. Una primera lectura de las mismas ya nos permite hacernos una idea de aquello a lo que hacen referencia, pero me parece muy interesante compartir el desarrollo de cada una de ellas:

“Trabajamos para entender la disrupción en la industria y sus desafíos, pero como queremos trabajar con nuestros clientes es ayudándoles a definir su visión de futuro, ¿qué quieren ser? ¿Hacia dónde quieren ir? Porque cuando trabajamos con ellos y colaboramos con ellos para entenderlo, podemos proporcionar la solución adecuada y optimizarla para que realmente se adapte a sus necesidades. Y aunque entendemos las tendencias, también entendemos que cada cliente es único. Y queremos asegurarnos de que realmente trabajamos de cara a sus objetivos.

En segundo lugar, en cuanto a la rapidez, nos gusta centrarnos en la velocidad de la innovación y en ayudar a nuestros clientes a alcanzar sus objetivos y su visión con rapidez. Así, en el caso de AWS Automotive, no solo aportamos la amplitud de los 200 servicios existentes, también nos centramos en crear soluciones específicas para el sector de la automoción. Esto significa servicios y capacidades innovadoras que estamos diseñando y desarrollando, que son únicos para las necesidades del sector.

Con la tercera palabra, juntos, nos centramos realmente en la colaboración, con el fin de avanzar rápidamente, y para resolver la complejidad de los tipos de problemas que estamos resolviendo, sabemos que tenemos que hacerlo junto con nuestros clientes y junto con la amplia red de socios de AWS. Así que no queremos centrarnos en tratar de resolver esto por nosotros mismos. Se trata de un enfoque muy colaborativo que adoptamos para asegurarnos de que aportamos las mejores capacidades, no solo de AWS, sino también de nuestros socios.”

Con respecto a este último punto, juntos, hay un aspecto clave en la filosofía de AWS Automotive que ayuda a entender mejor la dimensión de la red colaborativa tejida por AWS:

“Nos fijamos en todo el ámbito de la industria. Fabricantes y proveedores que abastecen a la cadena de suministro, concesionarios y en los minoristas. Prestamos atención a toda la cadena de valor de la industria del automóvil […] teniendo en cuenta a los usuarios particulares, como nosotros, pero también en proveedores y gestores de flotas. Así,   estamos trabajando con fabricantes de vehículos, como BMW, Toyota, o Honda, por ejemplo, pero también con los proveedores. Como Continental o como Bosch, por ejemplo.”

Podemos imaginar cómo serán los coches (y demás tipos de vehículos, claro) dentro de cinco años, podemos intentar proyectar, con cierta dificultad, cómo habrán evolucionado dentro de diez años, ir más allá, salvo para los profesionales del sector que, claro, ya están trabajando en el vehículo del futuro, para el resto del mundo es algo así como jugar a la lotería: podemos probar suerte, pero seguramente fallemos.

Sin embargo, lo que sí que podemos afirmar sin miedo a equivocarnos es que la convergencia entre el sector automotriz y la nube ya ha alcanzado el punto dulce y que, de aquí en adelante, esta conexión no hará más que crecer y hacerse más y más sólida. El futuro de la industria del motor pasa, indefectiblemente y por fortuna, por la nube.