El coronavirus tendrá un impacto significativo en el mercado de semiconductores en 2020

La crisis que está provocando el coronavirus COVID-19 va a tener un impacto más que notable en todo tipo de sectores y mercados. Entre ellos, según IDC, en el de los semiconductores. En la actualidad, a medida que se expande por multitud de países tras tener un fuerte impacto en China, el impacto de esta expansión está solo comenzando a apreciarse, y ya se puede ver que está teniendo profundas implicaciones en la cadena de suministros.

En el informe que acaba de presentar IDC sobre el impacto del coronavirus en el sector de los semiconductores se ha planteado mediante cuatro posibles escenarios que pueden darse en cuanto a impacto y a su recuperación. Cada uno de estos escenarios se basa en las asunciones y severidad del impacto en el negocio de los proveedores de tecnología.

Entre los puntos destacados del informe destaca un 80% de posibilidad para una contracción significativa de los ingresos del mercado de los semiconductores a nivel mundial, en vez del crecimiento del 2% que se esperaba hasta ahora. También que hay una posibilidad entre cinco de que haya un rebote fuerte y rápido en 2020 tras la crisis del coronavirus.

Eso sí, en el informe se avisa de que la crisis del COVID-19 está todavía en sus primeras etapas a nivel mundial, con demasiadas variables todavía en evolución para armar de forma inmediata una previsión única como respuesta. Por ahora se ve que el impacto en las cadenas de suministro en China son significativos, y el tiempo que tardarán en recuperarse es incierto.

En el primero de los escenarios planteados se augura una caída de los ingresos de venta de semiconductores igual o superior al 12%. En este caso se augura una recuperación de la cadena de suministro de entre uno y tres meses, mientras que el impacto en la economía, en la demanda de tecnología y en la industria tecnológica en general durará un mínimo de entre 9 y 12 meses.

El segundo de estos escenarios plantea una caída de los ingresos por la venta de semiconductores de entre un 3% y un 6%, con un tiempo de recuperación de la cadena de suministros de entre 3 y 9 meses, el mismo tiempo que tendría impacto la situación en la economía, la demanda tecnológica y la industria del sector.

Mientras, el escenario 3 y el 4 plantean un crecimiento de ingresos para el sector. El tercer escenario prevé un aumento en ingresos por ventas del 2%, con un tiempo de recuperación para la cadena de suministros comprendido entre uno y tres meses. Además, el tiempo que la crisis del coronavirus tendrá efecto en economía, demanda de tecnología e industria tecnológica está entre los 3 y los 9 meses. Por último, el cuarto escenario plantea un crecimiento de los ingresos por la venta de semiconductores igual o superior al 6%, con un tiempo de recuperación de la cadena de suministro de tecnología, de la economía, de la demanda tecnológica y del sector tecnológico en general de entre uno y tres meses.

En el punto en el que nos encontramos, IDC cree que el escenario con más probabilidad de darse debido a esta crisis será un descenso de alrededor del 6% en los ingresos por ventas de semiconductores en 2020, con un 54% de probabilidad. Bajo este escenario, la cadena de suministros comenzaría a recuperarse, y las cuarentenas y las prohibiciones de viajar se relajarían hacia el verano. Para el mercado de los semiconductores a nivel mundial, el impacto sería de unos 25.800 millones de dólares. A corto plazo habrá una demanda menor de sistemas y algo de impacto en la disponibilidad de componentes, pero a medida que vaya produciéndose la recuperación volverá el crecimiento al mercado.

Según Mario Morales, Vicepresidente del programa de semiconductores y tecnologías habilitadoras de IDC, «la emergencia del COVID-19 ha traído consigo prohibición de viajes y cuarentenas, una ralentizacion masiva de la cadena de suministros, una incertidumbre en la bolsa, la caía en la confianza de las empresas y un pánico creciente entre la población. A pesar de la creciente incertidumbre y pánico, los proveedores tecnológicos deben seguid centrándose en sus inversiones a largo plazo, mantener la interacción con partners y posibles clientes y buscar mercados específicos para encontrar estabilidad. Las tecnologías emergentes, como el 5G, el Internet de las Cosas, la computación de alto rendimiento y el edge inteligente serán fundamentales para una recuperación general del sector tecnológico«.