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Samsung invierte en GlobalFoundries confirmando la marejada en semiconductores

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Samsung y GlobalFoundries

Otoño caliente el que nos espera si se confirman las operaciones (de momento en fase de rumor) que tienen como protagonista al gran segmento de los semiconductores. Si ayer nos hacíamos eco del interés de NVIDIA por comprar ARM, hoy nos llega otra información también importante: la inversión de Samsung en GlobalFoundries.

La inversión es de alta estrategia y tiene su lógica en dos motivaciones principales. Por un lado, Samsung tiene grandes ambiciones para su división de semiconductores hasta el punto de aspirar a dejar atrás a Intel en ingresos y también a TSMC para convertirse en la primera foundrie mundial en 2030. GlobalFoundries es una vía rápida para conseguirlo.

La segunda clave viene derivada de la política de la administración de Trump, el bloqueo a Huawei como punta de lanza de una guerra comercial con China de consecuencias impredecibles y la declaración de políticas para restaurar la fabricación de semiconductores en suelo estadounidense. Una de ellas es una enmienda en el Senado para una inyección de capital en la industria de semiconductores de la nación de hasta 25.000 millones de dólares para investigación y desarrollo, incluida la financiación de otras partes del proceso de fabricación, como el embalaje de circuitos integrados.

GlobalFoundries es la segunda foundrie mundial, muy por detrás de TSMC en volumen de negocio, pero altamente estratégica. Una gran corporación que trabaja para terceras compañías en la producción de chips. Su capital está controlado por los Emiratos Árabes Unidos, pero es una compañía estadounidense a todos los efectos con sede central en Santa Clara, California. Y es clave para no tener problemas en EE.UU, y en Europa, y de paso, acceder a los contratos militares y gubernamentales altamente lucrativos.

Samsung y GlobalFoundries, inversión estratégica

En este escenario, todo apunta que Samsung será otra de las compañías de semiconductores que se alejará de China para acercarse a los mercados occidentales.

GlobalFoundries tiene fábricas en varias partes del mundo y una de las más importantes está situada en Dresden, Alemania. Ahí es donde comenzaría la inversión de Samsung financiando en exclusiva el aumento de capacidad de suministro de energía desde 63 a 100 Megavatios, según describe Coreteks citando fuentes internas.

Esta fábrica obtuvo recientemente la certificación para fabricar «productos seguros», lo que permite a la división alemana producir chips para transacciones financieras, tarjetas inteligentes, identificaciones digitales, así como otros productos y aplicaciones para el sector público o industrias que requieren un nivel adicional de seguridad e integridad en el proceso de producción. Se incluye chips para gobiernos y militares.

El pasado mayo, el rival de Samsung, TSMC, anunció que construirá una fábrica de 5 nm en Arizona con el apoyo de ese estado y del gobierno de los EE. UU. para crear 1600 empleos locales. La anuncio se produjo cuando la compañía taiwanesa se enfrenta a restricciones potenciales de los Estados Unidos para proporcionar chips a gigantes chinos como Huawei.

Samsung parece estar tomando un enfoque diferente. En lugar de tratar de ganar el favor de la administración de Trump mediante la construcción de una nueva fábrica en los Estados Unidos, la compañía coreana espera asegurar un punto de apoyo indirecto en los Estados Unidos invirtiendo en GlobalFoundries. También en Europa.

Coordino el contenido editorial de MC. Colaboro en medios profesionales de TPNET: MCPRO, MuySeguridad, MuyCanal y Movilidad Profesional.

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