La seguridad y la complejidad, principales problemas en la gestión de la nube híbrida

Los responsables de TI de empresas de todo el mundo se apoyan cada vez más en la nube híbrida, que nace de la combinación de servicios de nube pública, de proveedores como AWS o Azure, con nubes generadas en privado, con hardware propio. Su popularidad se debe sobre todo a las posibilidades que ofrece de cara a la agilidad, seguridad y flexibilidad en el trabajo, fundamentalmente en entornos de teletrabajo o trabajo híbrido. Pero no todo son ventajas en el uso de este tipo de entornos. También tienen sus inconvenientes, como queda reflejado en el informe de Cisco 2022 Global Hybrid Cloud Trends, que acaba de ver la luz.

El informe lo ha elaborado por 451 Research, que ha utilizado como base para ello una encuesta ente 2.500 responsables de TI de 13 países especializados en cloud computing, DevOps y redes de empresa; sobre su experiencia en el despliegue de la nube híbrida en la empresa. Para empezar, en el informe se fija la definición de nube híbrida como una combinación de un mínimo de dos nubes «que están gestionadas de manera centralizara para su interoperabilidad, y que pueden incluir nubes privadas en local, privadas almacenadas en espacios de terceros, o públicas/IaaS«.

Entre las conclusiones del informe destaca el hecho de que la nube híbrida goza de más popularidad que nunca. Un 82% de los encuestados para el informe aseguran que la han adoptado ya en sus empresas. Y un 47% aseguran que tienen desplegadas entre dos y tres nubes IaaS (Infraestructura como servicio). Solo un 8% utiliza un único proveedor cloud IaaS. La seguridad es uno de los problemas principales que se encuentran los profesionales de TI para el despliegue de varias nubes. Lo consideran así un 37% de los participantes en la encuesta que ha servido como base para el informe.

Por otro lado, el informe refleja que la colaboración es clave. Es esencial para la redes, las operaciones cloud y los equipos de DevOps. Todos los encargados de realizar operaciones relacionadas con estas tres áreas deben comunicarse entre ellos para que el modelo de nube híbrida de su empresa sea un éxito. Por eso, un 55% de los encuestados han puesto en marcha equipos que pueden aportar una perspectiva de organización interdepartamental. Además, la mitad han organizado un área de CloudOps y NetOps para asegurarse de que la estrategia de organización de la nube híbrida de la empresa cumple los objetivos fijados.

En general, la mayoría de los encuestados ve a la colaboración entre departamentos como una prioridad, que puede aportar beneficios como una mayor seguridad de la nube para un 45% de los encuestados. Un 41% también ve a la eficiencia operacional como un resultado positivo de la colaboración, y un 39% creen que la colaboración puede mejorar el rendimiento de las aplicaciones.

Para los desarrolladores, la adopción de infraestructuras híbridas es una prioridad, y el 53% asegura que están cambiando de cargas de trabajo durante la semana entre ubicaciones en local y fuera de las instalaciones de la empresa. Un 59% está adoptando la metodología conocida como Infraestructura como código (IaC) y un 44% las tecnologías nativas cloud para mejorar su seguridad. Un 47% de los participantes en la encuesta señalaron que la exigencia de trabajar primero para la nube es el punto de inflexión para el cambio de procesos y herramientas de desarrollo.

Otro de los principales problemas para el despliegue y gestión de la nube híbrida es la complejidad operacional. Así lo han manifestado el 35% de los preguntados. Además, un 57% de los encuestados que ocupan puestos relacionados con redes creen que DevOps es un área crítica a la hora de desplegar la estrategia de nube híbrida.