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La automatización industrial puede evitar el 30% de los accidentes laborales en España
La automatización industrial no solo es beneficiosa para los procesos y la productividad en las empresas en las que se implanta. También puede resultar un revulsivo importante en materia de seguridad laboral. Así se refleja en un estudio realizado por Universal Robots en colaboración con Asepeyo.
En el análisis se utilizaron las estadísticas del Ministerio de Trabajo y Economía Social sobre los accidentes laborales en 2022, y según sus conclusiones, el 30% de los accidentes laborales en España tuvieron su origen en el sobreesfuerzo físico en el sistema musculoesquelético. Precisamente las lesiones que la automatización industrial podría reducir hasta un nivel mínimo.
Estas soluciones, entre las que está la robótica colaborativa, se encargan de las tareas relacionadas con los trabajos repetitivos, y también con la manipulación de cargas. Por tanto, de adoptarse de manera generalizada en la industria española podría evitar hasta 160.000 accidentes de trabajo ocasionados por el sobreesfuerzo físico.
No solo eso, sino que con la automatización industrial se podía reducir de manera bastante radical el número de enfermedades profesionales. Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social analizados para el estudio, en 2022 hubo 22.408 partes de enfermedades profesionales en España. De ellas, el 53,7% tuvieron su origen en posturas forzadas y movimientos repetitivos durante el trabajo.
Entre las más comunes están las causadas por la fatiga y la inflamación de tendones y músculos por forzar el cuerpo con tareas físicas pesadas y exigentes. Asepeyo apoya estos datos con sus propias fuentes, ya que según sus archivos, un 30% de los partes de accidentes con baja de sus empresas mutualistas son por sobreesfuerzos y transtornos musculoesqueléticos.
Estos accidentes y bajas por enfermedad laboral impactan de manera notable no solo en los niveles de seguridad en el trabajo y en el bienestar de los empleados. También afecta a la productividad de las empresas. Cada accidente laboral supone una media de 11,4 días de baja, lo que afecta sin duda al funcionamiento de la empresa en la que trabaja.
Esto afecta sobre todo a los sectores relacionados con el suministro y gestión de residuos, las industrias extractivas, la construcción y la industria manufacturera. Por tanto, estos son los sectores que más pueden reducir los accidentes laborales con la automatización industrial.
Una de las soluciones que más podrían contribuir a ello, como hemos mencionado, es la robótica colaborativa, que destaca por su capacidad para funcionar en entornos de trabajo híbridos, en los que trabajan en cooperación directa las personas con los robots. Para garantizar su funcionamiento en la industria, esta solución de automatización industrial se ha sometido a distintos estándares de calidad y seguridad.
Eso sí, para ofrecer la seguridad necesaria es imprescindible someter su implementación a una evaluación de riesgos que analice todos los escenarios posibles en los que podría haber accidentes. También será necesario evaluar las consecuencias de estos accidentes y la probabilidad de que sucedan. De esta manera se podrá valorar el riesgo que tendrían, pero también las medidas que habría que tomar para eliminarlos por completo o reducirlos a la mínima expresión.
Alejandro Climent, Responsable de soporte técnico para el Sur de Europa y MEA de Universal Robots ha destacado sobre este tipo de soluciones que «al asumir las tareas relacionadas con la manipulación de cargas, la realización de movimientos repetitivos y las labores propensas a generar golpes y choques con otros objetos, la robótica colaborativa se ha erigido en una herramienta para la mejora de la seguridad laboral”.
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