Conecta con nosotros

Noticias

Laura Lark: de Google a Marte

Publicado el

Laura Lark

Dicen que muchos deportistas, al lograr el éxito en la más alta competición de su disciplina, tienen que enfrentarse a un hecho que es, a la vez, positivo y negativo: ¿positivo? Han llegado a lo más alto. ¿Negativo? Ya no queda ninguna meta por lograr. Esto nos explica que bastantes de ellos, precisamente al coronar la cima, deciden probar con otros deportes (donde, generalmente, no suelen destacar, pero tienen el acicate de llegar más alto). En realidad, esto ocurre entre otros muchos profesionales de distintas disciplinas, y por lo que hemos podido leer hoy en Motherboard, Laura Lark es el perfecto ejemplo de esto que estoy contando.

Pero, ¿quién es Laura Lark?, es posible que te estés preguntando. Pues estamos hablando de una licenciada en informática, cuyo primer trabajo (según indica en su perfil de LinkedIn) fue como actriz-artista en una compañía circense, donde se especializó en números con monociclo, si bien practicó también otras disciplinas propias de ese mundo. De ahí pasó a trabajar dos periodos de cuatro meses en Microsoft, en un puesto junior de ingeniería, algo que combinó con un puesto de asistente al profesorado en su universidad. Y fue entonces, en 2011, cuando todo cambió y, pese a su poca experiencia, fue contratada para un puesto senior de ingeniería en Google, puesto que desempeñó entre septiembre de 2011 y enero de este mismo año.

Mujer, joven y con poca experiencia, y aún así, y gracias a su indudable talento, logró una posición senior en una de las compañías más deseadas no solo por los recién licenciados, sino por otros muchos profesionales. ¿Cuál puede ser el siguiente paso para alguien que ha alcanzado tanto en tan poco tiempo? Seguramente, ante esa pregunta, un niño pequeño respondería «¡Hacerse astronauta!», y por raro que pueda parecer, esto guarda cierta relación con el presente profesional de Laura Lark, que en este momento, precisamente cuando estás leyendo esta noticia, se encuentra en el gigante rojo. Sí, en Marte.

Bueno, en realidad, obviamente no, no ha viajado hasta el planeta rojo y se ha establecido como colona. En realidad no ha abandonado nuestro planeta, se encuentra en el archipiélago de Hawai, más concretamente en un laboratorio en el volcán Mauna Loa. ¿Con qué objetivo? Llevar a cabo una simulación realista de cómo sería permanecer, durante ocho meses, en Marte. El objetivo es experimentar múltiples aspectos relacionados con una hipotética misión tripulada al planeta rojo, una misión que por su altísimo coste, solo estaría justificada con una larga estancia (en algunos casos se ha llegado a plantear incluso como definitiva, con un billete solo de ida) de los astronautas-exploradores-colonos. Desde las reacciones físicas y psicológicas de permanecer largo tiempo en un entorno de ese tipo, hasta poner a prueba los sistemas de gestión de recursos que se han planificado, este experimento, denominado HI-SEAS (Hawai’i Space Exploration Analog and Simulation), pretende valorar el factor humano en una misión de este tipo.

Aunque no se muestra muy activa, Laura Lark ha creado un blog en el que comparte alguna información sobre el proyecto, así como algunas imágenes sobre el laboratorio y el entorno en el que se encuentra. No obstante, lo más interesante será conocer, una vez finalizado el estudio, sus conclusiones. Y es que, en bastantes aspectos, la tecnología ya está lista para llevarnos a Marte, y ahora son aspectos como el comprobado en este experimento, los que es necesario tener muy claros antes de que llegue el que, de nuevo, y como ya dijo J. F. Kennedy en su mítico discursos de 1962 sobre el programa espacial norteamericano y las misiones tripuladas a la Luna, volver a afrontar un desafío de este tipo, «No porque sea fácil, sino porque es difícil«.

 

Imagen: Laura Lark

Lo más leído