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La nube, el escenario de la mayor batalla entre las grandes de la tecnología

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En la nube está teniendo lugar una de las principales batallas que se está librando en el mundo de la tecnología en la actualidad. Y parece que, de momento la va ganando Microsoft. Al menos, en cuanto a ingresos anuales, aunque le siguen de cerca Amazon e IBM. Los otros cuatro grandes actores del mundo de la nube (Salesforce, Oracle, SAP y Google), según Forbes, quedan bastante por detrás, aunque no se rinden y amenazan con presentar batalla. Durante 2017, Microsoft ha ingresado gracias a la nube nada menos que 18.600 millones de dólares, seguida de cerca por Amazon, con 18.500 millones, e IBM, con 17.000 millones.

Mientras, Salesforce se ha hecho con 9.920 millones de dólares gracias a la nube. Oracle, con 5.600 millones, SAP con 4.710 y Google, según varias estimaciones, con 3.000. Todas estas compañías luchan por quedarse cada vez con una porción mayor de cuota de mercado, y sobre todo las tres primeras compiten entre sí con fuerza. Tanto, que de un trimestre a otro, su lugar en la clasificación de ingresos por la nube puede variar.

La nube, el escenario de la mayor batalla entre las grandes de la tecnología

Microsoft es la empresa que más ha ingresado por sus divisiones en la nube en 2017 (en la imagen, Satya Nadella, CEO de Microsoft).

Es lo que ha sucedido en el último trimestre de 2017, cuando IBM se aupó a la primera posición con los 5.500 millones de dólares logrados durante el periodo, un 30% más que el mismo periodo del año anterior. Microsoft, con una subida interanual de ingresos entre octubre y diciembre y 5.300 millones de ingresos, quedó en segunda posición. Y Amazon, con 5.100 y un crecimiento de año a año del 45%, quedó en tercer puesto. En estos tres meses, Salesforce se hizo con 2.680 millones de dólares, Oracle con 1.500 y SAP con 1.240. Se estima que Google ingresó durante este periodo unos 1.000 millones de dólares. En total, según Business Insider, el mercado de servicios de infraestructura en la nube mostró en el último trimestre de 2017 un crecimiento interanual global del 46%.

IBM, Microsoft y Amazon: los tres vencedores de la guerra

Aunque Microsoft haya sido quien más ha ingresado por la nube en 2017, la compañía que sale de 2017 como la ganadora más clara en este frente es IBM. Sobre todo si tenemos en cuenta que su división dedicada a la nube es sólo un 3% más pequeña que la de Amazon. Y alrededor del 10% más reducida que la de Microsoft, que lidera actualmente el mercado. Aparte, claro está, de ser quien más ingresos ha logrado entre octubre y diciembre pasados.

Todo a pesar de que los medios apuestan sin parar por Amazon como la vencedora del sector. Pero Amazon, con AWS, sólo gana en IaaS (Internet como servicio). Microsoft es la ganadora en la nube de empresa, y Amazon queda por detrás, mientras IBM le pisa los talones. Como se descuiden, es posible que llegue a adelantarla, tal como ha hecho con ellos y con Microsoft en ingresos en la última etapa de 2017. En cualquier caso, estas tres empresas son las claras vencedoras de esta batalla. Al menos de momento.

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IBM, la compañía dirigida por Ginny Rometti, ha superado a Microsoft y Amazon en ingresos en la nube durante el último trimestre de 2017

Mientras, Oracle y SAP siguen viendo crecer poco a poco sus áreas dedicadas a la nube. Ambas están invirtiendo con fuerza en tecnologías de nube híbrida, así como en programas dedicados a afianzar la credibilidad entre sus usuarios. Y Google, aunque ha conseguido unos resultados destacables en 2017, todavía queda por detrás en la nube. A pesar de todos sus recursos, tanto financieros como tecnológicos, no se ha tomado este mercado en serio hasta hace muy poco. Muchos dicen que Oracle y SAP llegaron tarde a la nube, pero es Google la que realmente se ha quedado rezagada con respecto a las otras seis. Eso sí, parece que se van a tomar en serio la nube de ahora en adelante, por lo que habrá que estar muy atentos a los pasos de los de Mountain View en la nube.

Las siete grandes de la tecnología en la nube

Lejos de aplacarse, parece que la guerra por la nube se va a recrudecer. Las primeras clasificadas lucharán a brazo partido por el primer puesto, mientras que las otras cuatro echarán el resto por reducir el espacio que las separa del bloque de cabeza. También lo harán entre sí. Microsoft va a seguir apostando por la nube híbrida, uno de los principales empeños de su CEO, Satya Nadella. Para él, el éxito de Microsoft en la nube se debe a la puesta en marcha de un refuerzo de sus ventajas en arquitectura, que pasa porque no haya grandes diferencias entre las tecnologías de la nube, la de los equipos en local y las más avanzadas. Para él, una de las tareas de Microsoft es facilitar a sus clientes cambiar de una a otra sin problemas. Y también quieren facilitar que puedan aprovechar la potencia de la Inteligencia Artificial en dichos entornos para sacar partido a los datos que posean.

Amazon lo está haciendo muy bien en muchas áreas, y sin duda merece reconocimiento por los esfuerzos que ha hecho hasta ahora en relación con la nube. Pero para seguir siendo uno de los principales actores del sector debe aumentar su presencia y posibilidades en PaaS (Producto como servicio) y SaaS (Software como servicio).

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Amazon debe seguir apostando por mejorar en PaaS y SaaS para avanzar en la nube. Foto: Rise

Mientras, IBM ha creado una división en la nube que funciona en sí misma como un servicio y que le ha generado casi 10.000 millones en ingresos a la compañía. También ha explotado, y con gran éxito, su poder y presencia entre las mayores empresas del mundo. A ellas les ofrece hardware, software y servicios de consultoría, con los que gracias a su oferta en la nube puede ayudarles a pasar sus sistemas locales a entornos en la nube. O al menos, a otros compatibles con ella. Sólo este área de su división de consultoría se ha convertido en un negocio de 7.000 millones para la compañía. Además, su emparejamiento de la nube y Watson ha sido un paso muy acertado.

Salesforce sigue creciendo e innovando con rapidez. Ya han ingresado 10.000 millones y su CEO, Marc Benioff, está empeñado en llegar a los 20.000 dentro de pocos años. Eso sí, para conseguirlo tendrán que adentrarse en nuevas categorías de negocio en la nube. Sobre todo, relacionadas con Paas (Plataforma como servicio). Mientras, Oracle cuenta con una división de SaaS (Software como servicio) que ya ingresa el 75% del total de su área de la nube.

No obstante, su Presidente, Larry Ellison, apuesta más por su área de PaaS, ya que cree que será todavía mayor que la de SaaS en el futuro. En este momento, todo parece indicar que crecerá con fuerza a corto y medio plazo, puesto que su oferta de «Base de datos como servicio» está consiguiendo una gran aceptación entre sus clientes. Ellison también apuesta por su tecnología de IaaS avanzada, y está seguro de que puede quitar una buena porción de la tarta en este segmento a Amazon.

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Salesforce, al igual que SAP, Oracle y Google, sigue avanzando en la batalla por la nube.

Por el momento, SAP está centrada en ser el principal proveedor de aplicaciones de empresa, algo que lleva haciendo muchos años. Como consecuencia, tiene muchos clientes que confían en la empresa. Esta confianza puede ser clave para lograr convencerlos de que pasen a la nube mucha de la tecnología que ahora tienen en local. SAP está todavía trabajando en algunas de esas masivas conversiones a la nube que tendrá que tener pronto listas. Cuando eso ocurra, será un luchador más potente en la batalla por la nube.

Mientras, Google, que empieza la carrera muy por detrás de las otras, no puede ser subestimada. A pesar de que otras le llevan años de ventaja, cuenta con un importante músculo en cuanto a tecnología y capital para invertir. Además, cuenta con una finalidad muy clara y, cuando se propone algo, va a por ello. Por lo tanto, habrá que estar atentos a sus movimientos.

¿Que pasará en la nube en 2018?

A corto plazo, los expertos esperan que el mercado de la nube seguirá creciendo. Aunque no sin dificultades en 2018. Según el analista de Canalys Daniel Liu, «han aparecido vulnerabilidades de seguridad, con los fallos basados en hardware Meltdown y Spectre a la cabeza, que han afectado a Intel y otros procesadores. Esto podría derivar en el robo de información sensible de los usuarios que esté almacenada en infraestructura compartida en la nube. Los parches de firmware lanzados para proteger contra ambas han desembocado en problemas de rendimiento, lo que aumentará la presión sobre los gastos de los proveedores de espacio y servicios en la nube. En la actualidad, estos gastos ya están creciendo más que sus ingresos, ya que tendrán que sustituir el hardware afectado y actualizar los sistemas para devolver la confianza a los usuarios. Pero también para evitar brechas de seguridad y que el rendimiento se vea afectado«.

Por otra parte, las leyes que afectan específicamente a los datos que entrarán en vigor en muchos países y regiones también afectará a la nube. La principal será la GDPR (General Data Protection Regulation, o Reglamento General de Protección de Datos), que tras su aprobación en 2016 entrará en vigor el próximo 25 de mayo en la Unión Europea. Liu apunta al respecto que «las nuevas leyes refuerzan la protección de datos personales a todos los ciudadanos de la Unión Europea, pero también afecta a la exportación de datos fuera de la UE. Los proveedores de servicios en la nube tendrán que adaptarse a la nueva legislación, para lo que tendrán que invertir tiempo en dinero en infraestructuras locales, recursos y medidas para asegurarse de que la cumplen. También tendrán que apostar por dar a sus clientes la confianza de que lo hacen, debido a las repercusiones financieras que conlleva el no hacerlo«.

A pesar de todo esto, en Canalys son optimistas, y apuestan porque el mercado crezca un 36% en 2018. «A pesar de estos cambios, la tendencia general que veremos en 2018 es un mayor número de empresas que aumentarán sus gastos en algún tipo de servicio en la nube«.

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