La sostenibilidad, clave para las empresas en 2023

La sostenibilidad medioambiental sigue siendo uno de los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad. En primer lugar porque los consumidores estamos cada vez más concienciados sobre su importancia. Estudios como el que acaba de publicar Salesforce, muestran que hasta el 65% de los consumidores afirma que dejará de hacer negocios con una empresa si los valores corporativos no se alinean con los suyos.

A esto se suma que la crisis energética derivada de la guerra de Ucrania seguirá marcando el devenir de 2023 y a las empresas no les quedará más remedio que tomar nota. Como indica Commvault en su informe de tendencias para 2023, las tensiones de la situación geopolítica actual seguirán afectando a las empresas en distintos aspectos y en el energético, se hará necesario el apostar por una tecnología más verde. Incluso si aún no lo han hecho por conciencia medioambiental, la escalada de precios y la inflación obligarán que las organizaciones se replanteen sus gastos y buscar tecnologías más eficientes.

En los centros de datos, esto podría pasar por una apuesta por la refrigeración líquida. Tal y como destaca el integrador de soluciones IT Fibratel, esta alternativa cuenta con una capacidad de enfriamiento mil veces mayor que la del aire y requiere diez veces menos energía para remover el calor. Como también asegura Ignacio Cereijo, director de desarrollo de negocio de la unidad de fdata, la instauración de este método de refrigeración podría suponer un ahorro de más de 205.000kWh por un rack de ocho servidores con respecto a el enfriamiento por aire.

 Lluis Altes, Senior Business Solutions Strategist en VMware, se muestra convencido de que en esa apuesta por la sostenibilidad se debería ir un paso más allá del “tradicional Green IT” y las compañías podrían comenzar a considerar todos los ángulos posibles en este ámbito, desde tendencias en boga como el Sustainable IT (la práctica de diseñar, implementar y mantener sistemas de tecnología de la información de manera responsable y eficiente en términos de recursos a lo largo de su ciclo de vida), al eWaste, pasando por el desarrollo de software sostenible que tenga como objetivo el aumentar la eficiencia general de las aplicaciones y de esta forma, reducir los requisitos de consumo de energía y espacio.

El mundo no se conformará sin embargo con poner en marcha nuevas formas de ahorro energético, sino que dará un paso decidido para innovar en el desarrollo de energía inteligente y tal y como promete Werner Vogels, VP & CTO en Amazon, en 2023 asistiremos a un rápido desarrollo a escala mundial que mejorará nuestra forma de producir, almacenar y consumir energía. Empresas de todo el mundo están innovando rápidamente en este espacio, en áreas como la investigación científica de materiales, o sistemas de almacenamiento energético de larga duración, como las sales fundidas, los bloques apilados y las pilas de combustible.

Otro campo, indica Vogels  es la descentralización de la energía y la creación de micro redes, de modo que los datos procedentes de paneles solares o parques eólicos se transmitirán, almacenarán y analizarán en la nube de modo de desplegar consumos más eficientes. También veremos el despegue de los dispositivos de consumo inteligente basados en IoT, que dará lugar a la siguiente oleada de innovaciones con tecnologías de ahorro energético.

Con todo la de la sostenibilidad, no deja de ser una carrera de fondo. Al analizar el compromiso real de las empresas para cumplir en esta materia, la consultora Accenture indica en su último informe que un 93% de las empresas no cumplirán con su objetivo de cero emisiones en 2050 y llama a optimizar el uso de recursos de la nube, ya que los centros de datos tradicionales duplican sus necesidades energéticas cada cuatro años.

Lo confirma además un reciente estudio publicado por 451 Research, en el que se asegura que las empresas en un país como España podrían reducir el consumo energético en más de un 80% si  trasladasen el grueso de sus cargas a proveedores como AWS, reduciendo como consecuencia su huella de carbono.