Oracle: «La tecnología es un agente de cambio y un importante facilitador en RR.HH.»

Hoy entrevistamos a Melanie Hache-Barrois, HCM Strategy Director South Europe en Oracle, quien nos cuenta cómo afecta la transformación digital a uno de los departamentos más importantes de las grandes empresas: el de los recursos humanos. La digitalización ha entrado con fuerza en una división que gestiona activos humanos y eso ha provocado toda una revolución que sus integrantes tienen que aprovechar.

MuyComputerPRO: ¿Cómo está cambiando la transformación digital el departamento de recursos humanos de las empresas?

Melanie Hache-Barrois: La tecnología ha irrumpido en todos los ámbitos de la empresa y de la vida, así que la gestión de recursos humanos es solo un área más que se ve afectada por la automatización. Por un lado, en su propio funcionamiento, ya que tiene a su disposición muchas más herramientas para organizar, hacer seguimientos, archivos e incluso formaciones online; y por otro por el uso que los propios empleados realizan y demandan: conexión total, movilidad, teletrabajo, globalización…

MuyComputerPRO: ¿Qué papel juega o va a jugar el responsable de RRHH en esta «revolución»?

Melanie Hache-Barrois: Los directores de recursos humanos deben estar en primera línea del consejo de dirección, ya que su labor hoy está indisolublemente ligada a la estrategia de negocio. Si hace unos años eran meros gestores de contratos, actualmente tienen la misión de hacer ver a toda la empresa la importancia del talento y de implementar medidas que lo potencien, beneficiando tanto al personal como a la cuenta de resultados de la empresa.

En cuanto a la tecnología, una importante nueva tarea de los equipos de recursos humanos es ser guardián de los datos de los empleados y el análisis de los mismos. Los equipos de recursos humanos son hoy los encargados de establecer una cultura de trabajo moderna, y creemos que llevan tiempo preparándose para ello.

MuyComputerPRO: ¿Cómo puede ayudar la tecnología a ambos (responsable y departamento)?

Melanie Hache-Barrois: Como decíamos antes la tecnología es un agente de cambio y también un importante facilitador. Así, aunque su irrupción en la empresa ha cambiado la forma de gestionar la plantilla, también se han convertido en algo fundamental para el departamento de recursos humanos, que por un lado puede ser mucho más rápido y ágil en tareas habituales (como la gestión de horarios, los temas administrativos…), y por otro obtener información prácticamente en tiempo real de lo que está sucediendo entre los trabajadores, incluso los de reciente incorporación o los eventuales. Por supuesto, siempre respetando los términos de privacidad correspondientes.

La digitalización es impulsora del cambio porque los procesos internos se agilizan, la información de los trabajadores es más inmediata y precisa, la conectividad permanente ha cambiado el modo de trabajar… Pero por otro lado, la tecnología es también el facilitador más importante con que cuentan las empresas para adaptarse al nuevo entorno, como por ejemplo la llegada de la inteligencia artificial a la gestión de recursos humanos (bots que responden peticiones de información o gestionan procesos sencillos).

Existe un argumento de negocio sólido para aumentar la experimentación en la forma en la que se administra el talento y, recae en el departamento de recursos humanos, la labor de ayudar a los empleadores a invertir en las herramientas y estrategias correctas para propiciar un cambio positivo.

MuyComputerPRO: ¿Los empleados son parte también de la transformación digital de las recursos humanos?

Melanie Hache-Barrois: El empleado del futuro, y prácticamente del presente, es actor y espectador de la transformación digital. Los profesionales jóvenes de la generación millenial son nativos digitales que impulsan el cambio: demandan, o más bien exigen a su empleador ciertos recursos digitales y muchos no perdonan retrasos o falta de agilidad en este sentido. Por otro lado, tanto los jóvenes como los sénior tienen por delante el reto de la formación permanente en este tipo de habilidades: deben ser más flexibles y contar con un conjunto interdisciplinar de habilidades que, combinando capacidades digitales con capacidades de desarrollo de negocio, garantice la consecución del máximo valor para la empresa.

Más concretamente, por ejemplo, las TI les pueden ayudar promoviendo la colaboración abierta para desarrollar las nuevas competencias necesarias en la nueva era digital; o también a través de nuevas aplicaciones como la inteligencia artificial (IA), que permite crear innovación y libera de cargas de trabajo repetitivas.

MuyComputerPRO: Es curioso saber que una de las tendencias más actuales del TI, la Inteligencia Artificial, la llevan usando ya desde hace años en recursos humanos…

Melanie Hache-Barrois: Efectivamente, la inteligencia artificial es, y seguirá siendo en los próximos meses, materia de debate. En Oracle estimamos que su adopción empezará a cámara lenta en 2017 e irá cogiendo fuerza progresivamente. Sin embargo, también es cierto que en muchos departamentos de la empresa la estamos utilizando ya sin ser conscientes de que es IA, como las herramientas de tipo chatbot, los cuadros de horarios… La IA es sin duda la próxima gran revolución dentro de la transformación digital. Generará una explosión de nuevas funciones en el trabajo y también de nuevas oportunidades a medida que las empresas empiecen a hacer uso de las tecnologías emergentes.

MuyComputerPRO: ¿Cómo entienden los recursos humanos el concepto de «cultura de trabajo moderna»?

Melanie Hache-Barrois: Creo que podemos resaltar tres conceptos. En primer lugar la colaboración. Los equipos serán mucho más multidisciplinares, las barreras entre departamentos se harán más difusas, y además, se formarán equipos entre empleados eventuales y fijos. Lo importante es el conocimiento, y que el mejor talento trabaje en cada proyecto, sin importar de dónde proceda.

Después estarían las analíticas. Y no hablamos solo de analizar tareas o presupuestos, sino también a las personas: saber qué les interesa, qué les motiva, o cómo trabajan mejor. A mayor bienestar mayor compromiso y, en suma, mayor productividad.

Y por último formación, o más bien, la autoformación: ofrecer a los empleados, tanto presentes como futuros, las herramientas necesarias para que gestionen su propio aprendizaje y actualicen sus conocimientos en el área que les interese en cada momento.