Banco de Chile refuerza su seguridad con la ayuda de Wincor Nixdorf

La seguridad es una prioridad para toda entidad financiera. Pero concretamente en Chile, los ataques a los cajeros automáticos no han dejado de aumentar en los últimos años, desde el robo de información hasta las explosiones de los propios equipos. Esta situación llevó al gobierno a emitir un decreto en 2013 que daba a los operadores de ATM cinco años para reemplazar sus dispositivos por otros sistemas más seguros.

La familia CINEO de Wincor Nixdorf ha resultado ser una respuesta convincente para este requerimiento: incluye vigilancia audiovisual HD de los alrededores, cámaras en el propio cajero para monitorizar el panel de cliente y, sobre todo, asegura que sus cajeros sean particularmente resistentes a las explosiones de gas y otros ataques físicos.

A partir de la emisión de este decreto —Decreto 222—, Banco de Chile ya ha instalado más de 550 cajeros de Wincor Nixdorf. El año pasado hubo tres intentos de volar los nuevos sistemas con gas, y los criminales vieron que resultaba inútil. El banco no ha necesitado más pruebas de que está invirtiendo en la solución más segura. “No se trata de proteger el efectivo almacenado dentro del cajero, sino de evitar potenciales daños colaterales de las explosiones. La seguridad de nuestros clientes y nuestro personal es la principal prioridad para nosotros”, asegura Osvaldo René González García, director Security and Risk Prevention de Banco de Chile.

Wincor Nixdorf, además, se ocupa del mantenimiento de la base instalada de los equipos, y continuará haciéndolo también para los nuevos cajeros.