Huawei dijo no a Google para la fabricación de sus últimos smartphones

Solo quedan unas horas para que Google presente oficialmente sus nuevos modelos de smartphone, denominados Pixel y Pixel XL y considerados los sucesores de los Nexus. Gracias a varias filtraciones, ya se conocen prácticamente todos sus detalles, incluido su fabricante, HTC. Pero la taiwanesa no es la empresa que los de Mountain View querían en principio que fueses su fabricante, sino que habían elegido a la china Huawei, que el año pasado se encargó del desarrollo del Nexus 6P.

No obstante, según Cnet, los responsables de Huawei rechazaron la oferta de Google en cuanto quedó confirmado que su logo no aparecería en los teléfonos. HTC sí que estaba de acuerdo, por lo que ha sido finalmente la empresa encargada de su fabricación, y como se verá en unas horas, ninguno de los dos modelos lleva el logo de los de Taiwán. Tampoco aparece su marca por ninguna parte. Así, los Pixel que, al parecer, cuentan con un procesador Qualcomm Snapdragon 821 de 2,15 GHz, 4 GB de memoria RAM y entre 32 y 128 GB de espacio de almacenamiento interno, solo llevarán la de Google.

Pero según varias fuentes, este no ha sido el único motivo por el que Huawei se retirara del desarrollo de los Pixel. Al parecer, también tiene que ver con la distribución en Estados Unidos del Nexus 6P. Google acordó que este modelo se vendería a través de las cuatro principales operadoras de telefonía móvil estadounidenses. Para ello, el Nexus 6P era compatible con las cuatro, pero nunca se ha llegado a vender a través de ellas. Tampoco se cumplió el acuerdo que Google y Huawei firmaron para hacer idéntica inversión en publicidad del smartphone.

El rechazo de Huawei se ha producido hace relativamente poco, ya que el pasado mes de julio, un directivo de la compañía confirmaba durante una entrevista en el lanzamiento del P9 en Sudáfrica que iban a fabricar un nuevo modelo de Nexus este año. Su desarrollo del Nexus 6P fue la primera incursión de la compañía en Estados Unidos, pero parece que a partir de ahora será la propia empresa, que en la actualidad es el tercer mayor fabricante de móviles del mundo, la que se ocupe de lanzar sus terminales en el mercado estadounidense.