Intel ya permite probar 5G a clientes corporativos

El despliegue de determinadas tecnologías no es tan rápido como cabría desear, sobre todo en casos en los que es necesario establecer previamente complejas infraestructuras. Así, en ocasiones ocurre que las empresas interesadas pueden no poder realizar pruebas de su funcionamiento, impidiendo que las contemplen en sus planes a corto y medio plazo. Lo que, a su vez, retrasa la implantación de estas nuevas soluciones. Al final, estamos hablando de una pescadilla que se muerde la cola y que, en este caso, impide que muchas empresas puedan empezar a sacar el máximo partido a las nuevas tecnologías desde el primer momento.

Con el fin de evitar este problema, Intel ha puesto en marcha, en colaboración con AT&T y Ericsson, unas instalaciones en Austin (Texas, EE UU) en las que cualquier potencial cliente interesado en la tecnología 5G podrá comprobar de primera mano su funcionamiento y ver qué aplicación puede tener la misma en su propia infraestructura.

Según AT&T, esta es la primera instalación de este tipo y permite a los interesados realizar pruebas en las que comprobar la capacidad de este sistema para transmitir hasta casi 14 gigabits por segundo. Entre las funciones que se pueden probar se encuentran el streaming de vídeo 4K, así como la supervisión de un sistema de videovigilancia en tiempo real.

Pero esta es solo una de las posibles aplicaciones de 5G. Intel también ha puesto en marcha otros sistemas, gracias a los cuales será posible probar la conectividad 5G para otros fines, como la conexión directa a Internet, el empleo de redes VPN y los sistemas unificados de comunicaciones para las empresas. Gracias a esta iniciativa, las organizaciones interesadas ya no tendrán que conformarse con leer la información sobre las posibilidades de esta tecnología, sino que podrán verla en funcionamiento en un entorno empresarial real, con los usos que probablemente pretendan dar a la misma en su propia operativa.

La ya indudable importancia de Big Data, sumada al auge de Internet de las Cosas, con unas expectativas de hasta 50.000 millones de dispositivos conectados en 2020, dibujan un nuevo escenario en el que el uso de los datos que hagan las empresas marcará, sin duda, una gran diferencia.

Así, el despliegue de redes 5G y, especialmente, su llegada al ámbito corporativo tendrá una importancia que los CIOs y CTOs deben empezar a valorar lo antes posible (si es que no lo han hecho ya). Por eso, posibilidades como la planteada por Intel, AT&T y Ericsson son más que necesarias para que estos máximos responsables de tecnología puedan saber y probar, en primera persona, todo lo que 5G puede aportar a sus infraestructuras.