Google no renovará su contrato con el Pentágono

El contrato firmado entre Google y el Pentágono para desarrollar sistemas de armamento basados en inteligencia artificial generó una gran polémica dentro y fuera de la empresa. Los usuarios de los servicios y productos del gigante de Mountain View no vieron con buenos ojos este movimiento, y lo mismo ocurrió con sus trabajadores.

La situación alcanzó tal entidad que se empezaron a producir quejas masivas de trabajadores en Google y la imagen corporativa de la empresa se vio seriamente afectada, una realidad que ha obligado a la compañía a tomar cartas en el asunto.

Diane Greene, jefa de Google Cloud, ha confirmado que no van a renovar su contrato con el Pentágono y que por tanto no seguirán facilitando el uso de su tecnología para la creación de armamento militar de última generación. En total se estima que unos 6.400 empleados de Google firmaron una petición dirigida a la directiva de la compañía para que se cancelara dicho contrato, y como vemos han conseguido su objetivo.

Según fuentes que tienen contactos involucrados en este asunto el contrato que había firmado Google iba a servir como vía de acceso a otros acuerdos de trabajo conjunto con el Pentágono que podía acabar siendo muy beneficiosos. Parece que no pensaron en las cuestiones éticas que éste planteaba, aunque al final han sabido rectificar a tiempo.

Se espera que el gigante de Mountain View adopte un conjunto de normas públicas que recogerán un guión con una base ética mínima que seguirán para la adopción de futuros contratos con el ejército estadounidense.

Tecnología y armamento están hoy más unidos que nunca. Ésta es una realidad que no va a cambiar por muchas protestas que se lleven a cabo ya que hay intereses muy importantes en juego, pero su desarrollo podría al menos verse ralentizado por esas exigencias éticas de los principales gigantes del sector tecnológico.