Asana Workload lleva la lucha contra el estrés a las aplicaciones de gestión empresarial

Equilibrar la carga de trabajo entre los miembros de un equipo y evitar que situaciones de estrés o incluso, de burnout profesional. Este es el objetivo de Workload, una nueva característica que acaba de estrenarse en la popular suite de colaboración empresarial Asana.

Disponible para los responsables de gestión de proyectos basados en Asana, Workload analiza de forma gráfica la carga de trabajo que ha sido asignada a cada uno de los integrantes del proyecto, permitiendo de un vistazo, descubrir qué personas podrían estar sobrecargadas y por lo tanto, son susceptibles de sufrir más estrés laboral. Además dispone de un sistema de notificaciones y alertas con las que se advierte al manager que tal vez uno de sus colaboradores está asumiendo más trabajo del que realmente puede gestionar de forma razonable.

A partir de aquí, Workload permite a los managers IT redistribuir ese «exceso de trabajo» entre el resto de los miembros del equipo, de modo que el reparto de tareas esté más equilibrado. A cambio, Workload ofrece a los trabajadores establecer y modificar los niveles de carga de trabajo que están «dispuestos a asumir», si prevén por ejemplo que las tareas que se les han encargado en un primer momento, les dan margen para asumir nuevos retos.

Como todos los miembros del equipo pueden comprobar de qué forma se está repartiendo el trabajo, Workload favorece que el reparto de tareas sea lo más equitativo y justo posible y según los responsables de su desarrollo, supone un paso más para favorecer una mejor conciliación laboral y familiar.

Aplicaciones como Slack, Microsoft Teams o la propia Asana, pensadas para mejorar la forma de trabajar en las empresas, han experimentado un boom en los últimos dos o tres años. En el caso de Asana, startup fundada por el ex-Facebook Dustin Moskovitz y el ingeniero Justin Rosenstein, ha conseguido levantar 50 millones de dólares en su última ronda de financiación y la valoración global de la compañía ya supera los 1.500 millones.