ARM está desarrollando su propio chip para mostrar lo que pueden conseguir sus diseños

ARM va a desarrollar y fabricar su propio chip, según el Financial Times. Para ello, la compañía ha creado un nuevo equipo de trabajo, al que ha llamado Equipo de ingeniería de soluciones, y al que ha encargado esta tarea. Al frente del grupo está un antiguo directivo de Qualcomm, diseñador de los chips Snapdragon: Kevor Kechichian.

La misión de este equipo, como hemos mencionado, es fabricar un semiconductor capaz de mostrar las capacidades y funciones de los diseño de ARM. No se pondrá a la venta, y su objetivo es mostrar a clientes y compañías interesadas en los diseños de la compañía lo que pueden conseguir con ellos. Por tanto, además de consolidar los clientes con los que cuenta la empresa, la fabricación de este chip tiene como fin la atracción de nuevos clientes antes de que se produzca su salida a bolsa, prevista en principio para finales de este año 2023.

Al parecer, ARM empezó a trabajar en el prototipo de este chips hace aproximadamente seis meses. Varios directivos han confirmado al medio que ha dado la noticia que el diseño conseguido es más avanzado que cualquiera de los producidos para semiconductores por ARM hasta ahora. Al parecer, a juzgar por la cantidad de compañías externas a ARM que saben de la existencia de este chip, el proyecto es un secreto a voces dentro del sector de los chips.

Aunque ARM no quiere vender el chip, dado que su línea de negocio es vender la licencia de sus diseños a terceros, ni otros chips en caso de que decida fabricarlos, hay áreas del mercado en las que podría hacer avances. Por ejemplo, en el sector de los PCs, ya que los componentes de ARM no se encuentran con frecuencia, aparte de en algunos de los modelos de equipos Mac más recientes. Además, la empresa ha advertido hace unos días a sus inversores del riesgo que puede suponer una concentración de su negocio.

En 2022, los 20 clientes más importantes de ARM sumaban el 86% de sus ingresos. Por lo tanto, desde ARM han avisado ya a los analistas de que «la pérdida de un número pequeño de clientes clave podría tener un impacto significativo en el crecimiento del grupo«.

Pero independientemente de si ARM vende o no el chip que está desarrollando, su fabricación es buena para los consumidores, dado que el equipo de ingeniería de soluciones de la compañía está además trabajando, gracias a él, en la mejora de la seguridad y el rendimiento de los diseños de ARM. Y esto sí que es muy posible que llegue a los chips que se montan en los distintos dispositivos que llevan chips con diseño de la compañía.