¿Por qué la Nintendo Switch no convence a los accionistas?

Es un secreto a voces que Nintendo se juega mucho, muchísimo, con Nintendo Switch, su consola de nueva generación de la que, por fin, ya sabemos tanto precio como fecha de puesta a la venta. La espera ya solo será de poco más de mes y medio, hasta el 3 de marzo, y su precio de venta al público será de 300 dólares, según informa hoy Bloomberg. Se trata de una idea innovadora pero… ¿suficiente para aportar optimismo a los mercados y conceder un respiro a la situación económica de la compañía que, durante los últimos años, ha realizado una travesía a través del desierto?

A falta de su aceptación por los «jugones», dato que no conoceremos en realidad hasta pasadas las primeras semanas de disponibilidad, las perspectivas de los analistas no son demasiado optimistas. Para empezar, el precio es superior al de algunas promociones de las alternativas de última generación de sus principales rivales, Sony y Microsoft, que además ya han tenido tiempo suficiente para asentarse en el mercado de la última generación, al que Nintendo llega con bastante retraso. Por otra parte, y aunque Nintendo desde hace muchos años ya no «juega» a la baza del mayor rendimiento frente a sus rivales, ya son varias las voces que dudan de si sus prestaciones estarán a la altura.

La primera reacción de los mercados no demuestra demasiada confianza en ello, pues tras la presentación de la consola en Tokio los títulos de la empresa descendieron un 5,8%. Una muestra clara de que, aún a la espera de que Nintendo Switch llegue a los mercados, son pocas las expectativas. Esto, no obstante, también puede estar motivado por los dos grandes éxitos-fiascos de Nintendo del último año. El primero fue Pokemon Go, que disparó la cotización hasta que, poco después, los mercados asimilaron que en realidad el éxito no era tanto de la empresa nipona como de Niantic, responsable también de Google Ingress. El segundo «pinchazo» de Nintendo ha sido Super Mario Run, un título para iOS anunciado en la última keynote de Apple y que suscitó grandes expectativas. Sin embargo, tras su llegada al mercado, el juego no estuvo a la altura de lo esperado por los usuarios, que lo encuentran tedioso y caro (la versión básica del juego es gratuita, pero para disfrutarlo completo hay que pagar unos diez dólares).

Otro de los elementos que no terminan de convencer a los mercados es el modo online. Nintendo ha anunciado que su nueva consola dispondrá del mismo, y que será gratuito al principio, pasando a convertirse en un servicio de pago a posteriori. Esto, que vaya a ser de pago, es algo que ha sorprendido a muchos analistas, que ahora se preguntan cuál será la propuesta de valor de Nintendo a sus usuarios, para que estos acepten pagar por un servicio como éste. Es cierto que PlayStation y Xbox cuentan con servicios similares, pero que ya han tenido años para desarrollarlos y hacerlos competitivos, ahora la gran duda es si Nintendo será capaz de dotar al servicio del valor suficiente para ganarse a sus usuarios.

Así pues, de momento solo hay espacio para una tensa calma. De momento queda esperar hasta el 3 de marzo, cuando salga a la venta, y a los resultados de ventas tras el primer trimestre. Las estimaciones de Nintendo son de dos millones de unidades los primeros tres meses. Y a la vista de esos resultados, que dependen en gran medida de la capacidad que tenga la empresa nipona de atraer a sus potenciales clientes, dependerá que Nintendo Switch sea el revulsivo que la empresa lleva años buscando o, por el contrario, el temible pinchazo que puede poner en muy serio riesgo su futuro. Y, al menos de momento, parece que Nintendo no cuenta con las mejores cartas para esta crucial partida.

Imagen: Nintendo