Google, Cardboard y el futuro de la realidad virtual

Creo que ya he hablado de ello en alguna ocasión, pero el caso es que todavía recuerdo mi primera experiencia con la realidad virtual. Fue en un enorme salón de máquinas recreativas (videojuegos) que había en el centro comercial La Vaguada, de Madrid. Cerca de 45 minutos en metro, una cola de un cuarto de hora esperando mi turno y, finalmente, 300 pesetas (o quizá fueron 500, un dineral en cualquier caso) para ponerme un casco y sumergirme, durante unos tres minutos en una realidad de mentira.

En aquel momento, parecía que el futuro de la realidad virtual era brillante, pero algunos años después, principalmente tras el ocaso de Second Life (que, ojo, todavía sigue operativo) muchos pensamos que en poco tiempo nos olvidaríamos de esa tecnología para siempre. Sin embargo, hace poco tiempo tango Google como Facebook nos han sorprendido «resucitándola» para el gran mercado. Primero fue la empresa de Zuckerberg la que sorprendió con la compra de Oculus, y más recientemente los del buscador primero con Cardboard, un ingenioso objeto de cartón (el que puedes ver en la imagen superior) en el que situar el móvil frente a los ojos. Y este, en combinación con el software adecuado y los sensores del propio móvil, permite ver dos imágenes sensiblemente distintas (una en cada ojo, claro) y que, además, éstas cambien en base a nuestros movimientos.

Hoy hemos sabido, por Cnet, que Google lanzó ayer una nueva app para Android. Con dicha app, es posible tomar fotos panorámicas (circulares) que, al ser vistas en un móvil con Cardboard, serán sensibles a la posición de quien las observa. En otras palabras, si giras la cabeza a uno y otro lado, la imagen también se moverá. Como si realmente estuvieras en el lugar en el que la foto ha sido tomada.

De momento la app sólo está disponible para Android, si bien desde Google apuntan a que pretenden hacerla llegar también a iOS. Y, por otra parte, seguro que todavía se pueden efectuar mejoras en el modo en el que las panorámicas pueden ser compartidas. No obstante, esto habla claramente de que cada vez más fabricantes vuelven a apostar por la realidad virtual, por su integración con los sistemas de realidad aumentada (la combinación de ambas puede resultar muy interesante) y, sobre todo, por acercar ambas a nuestro día a día.

Imagen: Othree