El precio de los SSDs seguirá bajando: 8 centavos de dólar por gigabyte

Hace algunos trimestres el precio de los SSDs había sufrido un incremento importante, una situación que estuvo profundamente vinculada al mercado de la memoria DRAM. Los principales fabricantes de memoria NAND Flash, componente fundamental para la fabricación de dichas soluciones de almacenamiento, enfrentaban el salto a nuevos procesos productivos y además habían tenido que diversificar sus recursos para mejorar el suministro de memoria DRAM, lo que les había obligado a readaptar algunas de sus instalaciones.

La situación fue compleja y bastante caótica, y se dejó notar en los precios de todos los componentes y productos que utilizasen memoria NAND Flash y/o DRAM. Por suerte los avances han sido positivos y la situación ha mejorado de forma notable, tanto que el precio de los SSDs se ha reducido considerablemente y hemos vuelto a una situación de normalidad absoluta. Esto quiere decir que es un buen momento para comprar dichas soluciones de almacenamiento, aunque también es buena idea esperar ya que los precios seguirán bajando de forma sostenida hasta 2019.

Debido a la maduración de los nuevos procesos productivos ha sido posible potenciar la producción de memoria NAND Flash y reducir el coste de los chips basados en NAND Flash 3D de 64 capas, un escenario que unido a la demanda estable y a la acumulación de stock que tienen los principales vendedores de equipos informáticos y dispositivos móviles ha generado el escenario perfecto para que se «hundan» los precios de los SSDs.

Hoy por hoy es posible encontrar unidades SSD con una capacidad de almacenamiento de 500 GB por menos de 100 euros, una cifra muy buena que nada tiene que ver con los casi 150 euros que costaban hace unos meses. El exceso de oferta de memoria NAND Flash se mantendrá como dijimos durante los dos últimos trimestres de este año, y según las predicciones de la firma DRAMeXchange culminará en una reducción de precio que nos llevará hasta los 0,08 centavos de dólar por gigabyte.

El precio de los contratos de suministro también ha ido bajando de forma sostenida desde el primer trimestre de 2018 (entre un 15% y un 20%), lo que significa que aquellos que necesiten reponer stock o renovar acuerdos con sus proveedores no tendrán problemas para conseguir un buen precio.

Por contra el mercado de la memoria DRAM sigue creciendo y no da síntomas de que vaya a cambiar a corto plazo. Esto supone que el precio de la memoria RAM seguirá por las nubes, y la situación podría empeorar si los nuevos smartphones de 2019 llevan a cabo un aumento de las configuraciones de memoria RAM en las gamas medias y altas.