LG SuitBot, un robot wearable para el lugar de trabajo del futuro

LG SuitBot es la última incorporación al catálogo robótico del fabricante surcoreano. Será presentado oficialmente en la feria alemana IFA 2018 como el primer «robot wearable centrado en el ser humano» de la compañía.

La robótica será uno de los campos tecnológicos avanzados que liderarán el gasto en TI en 2018, junto a la Inteligencia Artificial, IoT, y la Realidad Virtual/Aumentada. Su campo de aplicación es enorme. Foxconn pretende instalar hasta un millón de robots en tres años para sus plantas de producción;  Amazon tiene ya miles para gestión de logística; existen para medicina, control biológico y fisioterapia; el campo militar y seguridad como los BigDog de Boston Dynamics adquirida por Google; los robots wearables de la división ActiveLink de Panasonic y un larguísimo etc, especialmente en el campo industrial, agrícola y de producción, automatizando tareas humanas.

LG SuitBot es otra muestra de lo que está por llegar. Se trata de un exoesqueleto robótico diseñado para «soportar y mejorar las piernas de una persona», brindando mayor resistencia y movilidad a trabajadores de fábricas que realizan trabajos pesados u operan herramientas pesadas.

El robot (construido en sociedad con la compañía coreana SG Robotics) fue diseñado con «ajustes ergonómicos y articulaciones que rotan naturalmente» para que sea fácil moverse ya sea que esté caminando, parado o trabajando por largos periodos largos. También tiene zapatos de «sandalias» incorporados, que LG dice se ajustan automáticamente para que el usuario pueda entrar y salir del robot portátil más fácilmente. LG dice que el SuitBot se conectará a otros robots CLOi para formar parte de una «red de trabajo inteligente».

No es el primer exoesqueleto que pretende dar a los humanos una fuerza sobrehumana. Hyundai y la compañía japonesa Cyberdyne han mostrado exoesqueletos médicos diseñados para ayudar a las personas con poca movilidad, mientras que Ford también está trabajando en un diseño que reduce la tensión para los trabajadores que realizan tareas adicionales.

A pesar de sus implicaciones sociales, la industria de la robótica está en pleno auge y su empuje será imparable las próximas décadas.