Estas son las 9 principales tendencias tecnológicas en las empresas para 2021

Seguro que hace tiempo que estás deseando que termine 2020 de una vez para empezar a pensar en lo que nos traerá 2021, a ser posible, mejor que lo que ha traído este año. Pero antes de que llegue el próximo año llega el momento de, con base en la marcha de la sociedad, la economía y la tecnología, hacer algunas predicciones sobre lo que nos espera en 2021 en cuanto a tecnología en la empresa. Como Gartner, que ha hecho ya su apuesta por las 9 tendencias tecnológicas que marcarán el próximo año en la empresa. No solo eso, sino que muchas de estas tendencias seguirán gozando de gran popularidad dentro de cinco o diez años, como veremos a continuación.

La primera recibe el nombre de Internet de los comportamientos, o IoB, que va emergiendo a medida que las tecnologías van aprendiendo a capturar las pequeñeces de la vida cotidiana de la gente. El denominado Internet de los comportamientos se encarga de combinar las tecnologías que se centran directamente en el individuo, como el reconocimiento facial, el rastreo de posición y el Big Data; y conectan los datos que se recogen con ellas con eventos de comportamiento asociados, como las compras en metálico o el uso del dispositivo.

Las distintas entidades utilizan estos datos para influir en el comportamiento humano, y Gartner prevé que para finales de 2025 alrededor de la mitad de la población mundial será objeto de al menos un programa de Internet de los comportamientos, tanto comercial como del gobierno. Aunque el IoB ya es técnicamente posible, habrá amplios debates éticos y sociales sobre los distintos enfoques que se utilizan para afectar al comportamiento.

El año pasado, Gartner ya habló de la multiexperiencia como una tendencia tecnológica estratégica, pero el año que viene esto se va a llevar un paso más allá con lo que se conoce como Experiencia total (TX), una estrategia que conecta la multiexperiencia con el cliente, el empleado y las disciplinas de experiencia de usuario. Gartner espera que las empresas que proporcionen una experiencia total consigan un rendimiento mejor que su competencia en métricas de satisfacción clave a lo largo de los próximos tres años.

Las organizaciones necesitarán una estrategia de Experiencia total a medida que las interacciones sean cada vez más móviles, virtuales y distribuidas, sobre todo por culpa del COVID-19. Este tipo de experiencias se encargan de mejorar las de las diversas partes implicadas en la consecución de un resultado de negocio transformado. Estas experiencias interrelacionadas son momentos clave para que las empresas que se están recuperando de la pandemia y buscan conseguir diferenciarse a través de nuevos elementos de experiencia disruptores.

Mientras tanto, los CIOs de cualquier país se enfrentan a más riesgos de privacidad e incumplimiento que nunca, a medida que la legislación de protección de datos a nivel mundial va madurando. A diferencia de los controles de seguridad comunes, la informática de mejora de la privacidad protege los datos en uso mientras mantiene los secretos o la privacidad.

En Gartner creen que para 2025, la mitad de las grandes empresas implementarán computación de mejora de la privacidad para proceso de datos en entornos no confiables, así como casos de uso de analíticas de datos multipartitas. Las empresas deberían empezar a identifica candidatas para la computación de mejora de la privacidad realizando actividades de proceso de datos que requieran transferencias de datos personales, monetización de datos, analíticas de fraude y otros casos de uso para datos altamente sensibles.

Otra de las tendencias para 2021 será la nube distribuida, que no es mas que la distribución de servicios de nube pública en distintas ubicaciones físicas, mientras que la operación, gobernanza y evolución de los servicios sigue siendo responsabilidad del proveedor de nube pública. Este proporciona un entorno ágil para escenarios organizativos con necesidades de latencia baja y reducción de costes, así como de requisitos de residencia de datos.

Además, la nube distribuida se ocupa de cubrir la necesidad de los clientes de tener recursos de cloud computing cerca del punto físico en el que hay actividad de negocios y de donde salen los datos. Para 2025, la mayoría de las plataformas de servicio ofrecerán al menos algunos servicios de nube distribuida que se ejecutarán donde se necesiten.

Otra de las tendencias para el año que viene será la posibilidad de contar con Operaciones en cualquier parte. Es decir, con un modelo operativo de TI diseñado para dar soporte a los clientes en cualquier punto, de dar a los empleados lo que precisan en cualquier lugar y de gestionar el despliegue de los servicios de negocios por infraestructuras distribuidas.

Esto va más allá del teletrabajo o de la interacción virtual con los clientes, ya que también ofrece experiencias de valor añadido en cinco áreas principales: colaboración y productividad, acceso remoto seguro, infraestructura edge y cloud, cuantificación de la experiencia digital y automatización para el soporte de operaciones remotas. Para el final de 2023, el 40% de las organizaciones habrá aplicado el modelo de Operaciones en cualquier parte para ofrecer experiencias de empleado y clientes físicas y virtuales mezcladas y optimizadas.

La malla de ciberseguridad también está entre las tendencias del próximo año. Su misión es permitir a cualquier acceder a todo tipo de activos digitales de forma segura, sin importar dónde están el activo o la persona. Se encarga de desconectar las políticas de refuerzo de la decisión de políticas a través de un modelo cloud, y de permitir que la identidad se convierta en el perímetro de seguridad. Para 20205, la malla de ciberseguridad será compatible con cerca de la mitad de las peticiones de control de acceso digital.

Dentro de las tendencias que también ganarán peso en 2021 están las empresas inteligentes y acoplables, que cambian de manera radical la toma de decisiones gracias al acceso a mejor información y a la posibilidad de responder a ella con más rapidez. Por ejemplo, las máquinas se encargarán de mejorar la toma de decisiones en el futuro, gracias a la interrelación entre los datos y la información. Pues bien, este tipo de empresas sentarán ls bases de nuevos modelos de negocio, de operaciones autónomas y de nuevos productos, servicios y canales.

En 2021 también va a ganar fuerza, entre las tendencias en empresas la Ingeniería de Inteligencia Artificial, aunque según las investigaciones de Gartner solo un 53% de los proyectos de IA pasan de prototipo a producción. Los CIOs y responsables de IT tienen dificultades en encontrar proyectos de este tipo que escalar, porque no tienen las herramientas para crear y gestionar un flujo de IA a nivel de producción. El camino a la producción en IA implica por tanto prestar atención a la Ingeniería de IA, una disciplina centrada en la gobernanza y la gestión del ciclo de vida de una amplia gama de IA y de modelos de decisión, como grafos de conocimiento o machine learning.

La Ingeniería de IA se sustenta en tres pilares principales: DataOps, ModelOps y DevOps. Una estrategia de Ingeniería de IA robusta facilitará el rendimiento, escalabilidad, interpretabilidad y fiabilidad de los modelos de Inteligencia Artificial al mismo tiempo que ofrece el valor completo de las inversiones en IA.

Por último tenemos a la hiperautomatización centrada en el negocio, que las organizaciones emplean para identificar con rapidez, clasificar y automatizar cuantas operaciones de negocio aprobadas y procesos TI sea posible. Aunque la hiperautomatización lleva siendo tendencia sin descanso desde hace algunos años, la pandemia ha aumentado su demanda dada la repentina necesidad de que todo sea digital en primer lugar. La avalancha de peticiones de los accionistas de las empresas ha llevado a que, como resultado, más del 70% de las empresas lleven a cabo docenas de iniciativas de hiperautomatización. Vamos a un futuro en el que la automatización parece inevitable e irreversible.