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Departamento de Justicia de EEUU prepara demandas por monopolio contra Facebook y Google

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Departamento de Justicia de EEUU prepara demandas por monopolio contra Facebook y Google

La presión sobre Google aumenta a ambos lados del Atlántico, ya que se enfrenta a varias demandas e investigaciones por monopolio, e investigaciones en Europa que pueden bloquear la compra por parte de los de Mountain View de Fitbit. Mientras, en Estados Unidos, apenas unos meses después de que el Departamento de Justicia anunciase la apertura de un proceso contra la compañía por monopolio, ahora parece que diversas autoridades y federales preparan más demandas contra la compañía.

Eso sí, esta vez no estará sola ante la justicia, ya que también están preparando demandas contra Facebook, que afrontaría sus primeras demandas en un movimiento que parece indicar que también va a aumentar la presión de las autoridades contra la red social. Sobre todo, después de que el presidente electo Joe Biden haya dejado claro que no está contento con Facebook por su propensión a servir de vehículo para la propagación de noticias falsas.

Google ya ha hecho numerosas declaraciones en el pasado en defensa de sus prácticas. Básicamente, en ellas dice que los consumidores no están obligados a utilizar sus productos y servicios, y que estos existen como parte de un mercado tecnológico competitivo. Algo que sin duda volverá a alegar contra estas nuevas demandas si se producen. Según el Wall Street Journal en ellas, al parecer, se alega que la compañía emplea el dominio de Google en la búsqueda y la publicidad en búsquedas para bloquear el crecimiento de competidores potenciales.

También que entre sus tácticas está pagar para que los fabricantes de móviles con Android pongan al buscador de Google como predeterminado en los dispositivos precargados con las apps de Google. La empresa también paga para que Google sea el buscador por defecto en el iPhone.

En cuanto a los cargos contra Facebook, al parecer están basados en averiguar si la empresa abusa de su posición para bloquear a la competencia o si pone los datos de sus usuarios en peligro. En este último caso, se prestará especial atención a las compras de WhatsApp e Instagram por parte de la compañía. Es posible que estas demandas no se presenten hasta principios de enero, pero Google ya se está preparando para enfrentarse a la demanda por monopolio que la administración estadounidense la puso en octubre.

Mientras tanto, en Europa, crecen las voces contra la compra de Fitbit por parte de Google. Amnistía Internacional ha pedido a las autoridades reguladoras de la Unión Europea que bloqueen la compra de Fitbit, en la que los de Mountain View van a invertir 2.100 millones de dólares, por riesgos para los derechos humanos, según The Economic Times. La organización ha hecho la petición mediante el envío de una carta, en la que apunta que Google «está recibiendo incentivos para fusionar y agregar datos a través de distintas plataformas«, por su modelo de negocio basado en la vigilancia.

Amnistía Internacional defiende que «la Comisión debe asegurar que la fusión no prosigue a no sea que las dos empresas puedan demostrar que han tenido suficientemente en cuenta los peligros para los derechos humanos y hayan implementado salvaguardas fuertes y con sentido que prevengan y mitiguen estos riesgos en el futuro«.

Según la organización, Google, que con la compra de Fitbit entraría en el negocio creciente de los wearables, tiene un modelo de negocio que le lleva continuamente a la búsqueda de más de datos sobre más personas en el mundo online y en el físico. Y para Amnistía Internacional «su fusión con Fitbit es un ejemplo claro de este enfoque expansionista con respecto a la extracción de datos, ya que permite a la empresa expandir su recopilación de datos al sector de la salud y los wearables«.

Teniendo en cuenta que Google se ha comprometido a que «no usará los datos de salud y bienestar para publicidad de Google«, el incentivo para usarlos de manera que «amenacen los derechos humanos demuestra la necesidad de asegurar que cualquier salvaguarda establecida como condición de la fusión será objeto de una supervisión con sentido y eficaz«.

Ya a principios de año, tras emitir un aviso sobre los riesgos de privacidad potenciales que daba el acceso a los datos de Fitbit por parte de Google, los reguladores de la UE pidieron a sus rivales que les informasen de si el acuerdo dejaría en desventaja a las apps de rastreo de fitness que hay publicadas en la Play Store de Google, así como de «cómo podría Google utilizar los datos para perfilar usuarios para sus búsquedas y publicidad«.

No solo la UE ha mostrado dudas con respecto a esta operación. También lo han hecho la Comisión de competencia y consumo de Australia, y el Departamento de Justicia de Estados Unidos. Por tanto, no parece que el cierre de este acuerdo de compra vaya a ser ni rápido ni sencillo.

Redactora de tecnología con más de 15 años de experiencia, salté del papel a la Red y ya no me muevo de ella. Inquieta y curiosa por naturaleza, siempre estoy al día de lo que pasa en el sector.

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