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La consultora EY hace planes para separar sus divisiones de consultoría y auditoría

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La consultora EY hace planes para separar sus divisiones de consultoría y auditoría

Se avecinan cambios en el sector de las grandes consultoras. Al menos en una de ellas, EY, que según el Financial Times está valorando muy seriamente la separación de sus divisiones de consultoría y auditoría. Al parecer, los partners de mayor rango de la compañía ya está trazando los planes para este drástico cambio, que supondría el mayor en el grupo de las consultoras como el grupo de las cuatro grandes (KPMG, EY, Deloitte y PwC) en dos décadas.

Este importantísimo paso es, al parecer, una medida pensada para que EY se libre de los conflictos de intereses que han aflorado por todo el sector y que ha acarreado numerosas acciones y medidas de las autoridades reguladoras de diversos países de todo el mundo. Tanto esta consultora como las otras tres que forman el grupo de las «big four» han recibido numerosas críticas por su supuesta falta de independencia en las auditorías de cuentas de empresas que hacen, sobre todo por las tarifas que cobran por sus trabajos de consultoría y asesorías en acuerdos e impuestos.

Los consultores dedicados a las auditorías se dedican a examinar las cuentas de empresas y a comprobar la calidez de los números, así como a enfrentarse con su dirección cuando creen que algunas cuentas u operaciones no tienen sentido. Pero las actuaciones en este sentido de KPMG, Deloitte, EY y PwC han estado envueltas en polémica en los últimos años, e incluso han tenido que hacer frente a varias sanciones por no hacer auditorías de manera correcta.

Si EY decide finalmente dar el paso mencionado, supondría un cambio en la manera de actuar de las consultoras, un sector al que se examina en todo el mundo con un ojo cada vez más crítico, después de que las cuatro grandes hayan estado implicados en varios escándalos, entre los que hay varias quiebras y problemas financieros graves de empresas previamente auditadas, como BHS o Carillion.

Los planes de la dirección de EY pasarían por crear una empresa de auditorías independiente del resto del negocio. En ella se quedarían los expertos de diversas áreas, como la relacionada con los impuestos, para dar soporte a las auditorías de empresa. La estructura definitiva de las compañías que resultarían de la división todavía se está debatiendo, y cualquier cambio de gran calado requeriría una votación de los socios y un acuerdo amplio de las firmas individuales nacionales que componen el negocio global de EY. Aparte, claro está, de la aprobación de las autoridades reguladoras correspondientes.

Por ahora, la consultora está intentando concretar una estructura concreta, que sea adecuada para todas las partes. El proceso, de aprobarse y seguir avanzando, tardaría meses en completarse, y puede que sea independiente de otro tipo de reestructuraciones en EY. Pero todavía no hay ninguna decisión tomada, tal como subrayan desde la consultora.

Redactora de tecnología con más de 15 años de experiencia, salté del papel a la Red y ya no me muevo de ella. Inquieta y curiosa por naturaleza, siempre estoy al día de lo que pasa en el sector.

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