Elon Musk en contra del teletrabajo y a favor de las jornadas de más de 40 horas semanales

Elon Musk es uno de los mil millonarios más mediáticos, y polémicos, que existen a día de hoy. Sus declaraciones no suelen dejar a nadie indiferente, aunque esto no siempre es para bien, y sus decisiones le han costado duras críticas en más de una ocasión aunque, curiosamente, el ejecutivo nunca ha llegado a entonar un «mea culpa» por sus errores, al menos que yo recuerde.

En esta ocasión unos correos electrónicos filtrados que fueron enviados por Elon Musk a los empleados de Tesla revelan que está totalmente en contra del teletrabajo. El CEO de Tesla ha sido contundente, aquellos que quieran teletrabajar no tienen sitio en la empresa, y también ha dado a entender que los empleados deben compartir su «pasión por el trabajo».

Elon Musk ha demostrado en más de una ocasión que es un «adicto al trabajo», no hablamos sin motivos, ya que en su momento llegó a decir que había trabajado hasta 120 horas en una semana. Esto puede tener efectos positivos si se mantiene dentro de unos límites razonables, pero lleva a una persona al punto de no ver más allá de sus obligaciones laborales se acaba convirtiendo en un serio problema que puede acabar arruinando su vida personal, y también puede tener efectos negativos en su vida profesional.

La idea que transmite el CEO de Tesla es que sus empleados deberían trabajar más de 40 horas a la semana, y de manera presencial. Ese enfoque no deja espacio a una posible negociación, son condiciones que cualquier trabajador debe cumplir, y si no lo hace acabará en la calle. El ejecutivo llega incluso a mofarse de aquellas empresas que permiten a sus empleados teletrabajar, y dice que estas «no han lanzado un gran producto desde hace mucho tiempo».

No hay duda de que la cultura del trabajo que promueve Elon Musk es totalmente tóxica y competitiva a un nivel que roza lo enfermizo. Obvia decir que esto no deja en buen lugar a Elon Musk, y al mismo tiempo supone un claro peligro para todas las empresas que puedan caer en manos del mil millonario, ya que este podría aplicar esa misma cultura del trabajo a dichas empresas. En este sentido, podemos traer a colación la posible operación de compra de Twitter, una empresa que hizo precisamente todo lo contrario que Tesla al permitir el teletrabajo de forma indefinida.

Tesla siempre ha sido estricta con el tema de las jornadas de trabajo, pero este nuevo enfoque podría traducirse en una importante pérdida de talento humano. Ya le ocurrió a Apple en su momento cuando decidió volver a la modalidad de trabajo presencial, un movimiento que hizo que su jefe de aprendizaje profundo se fuera a Alphabet. Desde ese momento, Apple dio marcha atrás y adoptó un enfoque mucho más flexible.