Luz verde a la construcción de la fábrica de TSMC en Alemania

El fabricante de semiconductores TSMC ya tiene luz verde para construir su primera fábrica en la Unión Europea, que será la tercera que tendrá fuera de Taiwan y China. Estará en Dresde (Alemania), y su construcción y puesta en marcha costará alrededor de 11.000 millones de dólares. De ellos, TSMC aportará 3.500 millones de euros (unos 3.800 millones de dólares), según Reuters.

En este caso, TSMC no abordará en solitario la construcción de la plantal. Lo hará mediante una operación conjunta con Bosch, Infineon y NXP Semiconductors. Las cuatro crearán una empresa conjunta, que se llamará European Semiconductor Manufacturing Company (ESMC), en la que TSMC invertirá unos 3.500 millones de euros. Además, la taiwanesa será la propietaria del 70% de sus acciones. Las otras tres compañías tendrán cada una un 10% del 30% restante.

El gobierno alemán aportará alrededor de 5.000 millones de euros a la construcción y puesta en marcha de la planta. Será una inversión que realizará en el marco de la Ley Europea de Chips de la UE, dotada con 43.000 millones de euros para este tipo de inversiones, y que busca doblar la producción doméstica de chips en la UE para 2030. Para ello necesita atraer fabricantes de chips a la región para que abran sus plantas en ella y conseguir que la zona dependa menos de plantas en ciertas partes de Asia para conseguir semiconductores.

La de TSMC es la mayor inversión en la región donde se va a levantar la planta, Sajonia. La planta generará además unos 10.000 puestos de trabajo. Estos engrosarán tanto la futura plantilla de la fábrica como las de sus proveedores.

El Ministro de Economía de Alemania, Robert Habeck, ha calificado a esta inversión como un voto de confianza en la economía alemana, golpeada por los elevados precios de la energía que siguieron a la invasión rusa de Ucrania, y que llevaron a un frenazo de la economía alemana y levantaron dudas sobre su futuro.

Habeck ha señalado, a la vista de esta y otras inversiones anunciadas por compañías de fabricación de semiconductores, que «va a haber un ecosistema de fabricación de semiconductores real en Alemania. Va a generar demanda para todo el sector: para fabricantes de máquinas, para fabricantes del sector de la óptica y para trabajadores cualificados«.