DeepTech: qué es y qué potencial tiene para transformar distintos sectores de la industria

Desde hace unos meses, en multitud de áreas relacionadas con la tecnología en la industria se escucha hablar del DeepTech y de su potencial para hacer que multitud de sectores de la industria puedan avanzar en su proceso de digitalización. Pero todavía muchos ignoran a qué se refieren en el mundo de la tecnología cuando se escucha este término, al que IDC se refiere como a un tipo de tecnologías emergentes, desarrolladas con base en la innovación científica y en ingeniería, que tienen como objetivo principal el abordaje de desafíos sociales.

A la vista de sus efectos y objetivos, todo indica que la adopción y expansión de la DeepTech es fundamental no solo para dar una nueva forma a distintos tipos de industria, sino que también es crucial para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. La DeepTech va más allá de la rentabilidad tradicional, y busca abordar áreas complejas de afectación global en distintas áreas. Entre ellas, la salud, la sostenibilidad o el transporte. Estas tecnologías están ya en el punto en el que pueden tener un impacto social profundo, gracias a que están en línea con los OBS de la ONU.

Entre las tecnologías que. están catalogadas como DeepTech están varias consideradas todavía emergentes. Entre ellas, varias que están bajo el paraguas de las Inteligencias Avanzadas: Inteligencia Artificial, interfaces humano-máquina e inteligencia de enjambre. También la conocida como computación de próxima generación, que engloba a la computación aumentada y a la neuromórfica. La aumentación humana, con tecnologías como la robótica, y las tecnologías y dispositivos de realidad expandida.

Todas estas tecnologías, a pesar de estar todavía en sus primeras etapas de desarrollo, tienen un futuro muy prometedor, y están llamadas no solo a revolucionar distintos sectores de la industria, sino también a mejorar la calidad de vida a nivel mundial.

Eso sí, como todas las tecnologías, ofrecen distintos obstáculos a la hora de adoptarlas y desarrollarlas, pero a pesar de ello, sobre todo por el potencial de avance y transformación que ofrecen, han despertado interés en multitud de áreas. Estas van desde los suministros básicos a los servicios profesionales, pasando por el sector de los vehículos eléctricos y autónomos, las tecnologías avanzadas de baterías, la agricultura de próxima generación o las tecnologías de captura de carbono.

Aparte de en la industria, la DeepTech ha atraído también la atención de diversas instituciones europeas. Entre ellas, la del Banco Europeo de Inversiones y la de la propia Comisión Europea, que junto con Naciones Unidas, están presentando propuestas basadas en DeepTech consideradas como clave. Además, muestran su compromiso con el desarrollo de soluciones que las incorporen con programas como Horizonte 2020 y DeepTech4Good.

Para desarrollar todo el potencial de la DeepTech, es necesario crear un ecosistema sólido en el que intervengan inversores, empresas privadas y legisladores. Mediante iniciativas como el Fondo del Consejo de Innovación Europeo, así como a través de varios fondos nacionales, se consigue aportar soporte financiero a las startups de tecnologías de DeepTech, asegurando su crecimiento y el desarrollo de sus tecnologías.

Para Lapo Fioretti, Analista de investigación de tecnologías emergentes y macroeconomía de IDC, «la DeepTech representa un cambio de paradigma en la innovación tecnológica, enfatizando la importancia de abordar desafíos sociales al mismo tiempo que los intereses empresariales. Aprovechando los descubrimientos científicos avanzados, estas tecnologías tienen el potencial de impulsar un cambio notable, así como de generar nuevas oportunidades para un mayor crecimiento económico«.