Estados Unidos y la Unión Europea aumentarán su colaboración en gobernanza y seguridad de la IA

La Unión Europea y Estados Unidos han llegado a un acuerdo para aumentar la cooperación en materia de IA. Sobre todo en lo relacionado con su gobernanza y su seguridad, pero también quieren mejorar la colaboración en otros aspectos técnológicos, como la computación cuántica o el 6G. Además, también cooperarán en el desarrollo de estándares de identidad digital y aumentarán la presión que ejercen sobre las plataformas, con el fin de apoyar la defensa de los derechos humanos.

En lo relacionado con la IA, ambas regiones reafirman «su compromiso para tener un enfoque basado en riesgos en lo que respecta a la IA, así como para avanzar en tecnologías de IA segura y fiable«. Además, en el comunicado en el que se ofrecen los detalles del acuerdo se anima a avanzar «en la aplicación del Código de Conducta Internacional del Proceso de Hiroshima para Organizaciones Desarrolladoras de Sistemas de IA Avanzados, que complementa nuestros respectivos sistemas regulatorios y de gobernanza».

La principal medida que parece que va a tomarse a más corto plazo es un compromiso entre los organismos encargados de la supervisión de la IA en Estados Unidos y la UE, la Oficina Europea de. la IA, y el Instituto para la Seguridad de la IA, para poner en marcha lo que han denominado «un diálogo«.

Este tendrá como fin una profundización de la colaboración entre ambas instituciones, sobre todo para animar la compartición de información científica entre los respectivos ecosistemas de investigación en Inteligencia Artificial. Entre los temas que tratarán figuran los bancos de pruebas, los riesgos potenciales y las tendencias tecnológicas para el futuro.

Además, la colaboración contribuirá al avance de la implementación de las Herramientas de Medida y Evaluación para una Gestión de Riesgo y una IA Fiable, algo esencial para minimizar la divergencia de manera apropiada en nuestros respectivos y emergentes sistemas regulatorios y de gobernanza de IA. También para cooperar en relación con los estándares internacionales e interoperables.

La declaración con los términos del acuerdo también destaca una lista de términos clave de IA, con definiciones que ambas partes aceptan. Este acuerdo en cuanto a definiciones será uno de los  elementos clave para dar un impulso a la estandarización de la Inteligencia Artificial.

Otro punto del acuerdo entre ambas regiones sobre la IA versa sobre la colaboración para impulsar la investigación en la aplicación de tecnologías de machine learning en casos beneficiosos, como los avances en resultados sanitarios, el impulso a la agricultura y el abordaje del cambio climático. Sobre todo, en lo relacionado con el desarrollo sostenible.

Por otra parte, ambas regiones desean expandir los esfuerzos de la colaboración en Inteligencia Artificial sumando más partners de todo el mundo al acuerdo. Por ahora señalan que van a seguir «explorando oportunidades con partners en Reino Unido, Canadá y Alemania sobre IA, relacionadas con el Acuerdo de Desarrollo de Donantes, para acelerar y poner de acuerdo la asistencia exterior a África para dar soporte a educadores, empresarios y ciudadanos de a pie para aprovechar la promesa de la IA«.

En cuanto a las plataformas, un área que la UE está reforzando y para la que ha aprobado varias leyes de amplio espectro hace poco, como la DSA y la DMA, ambos lados opinan que las grandes tecnológicas tienen que tomarse en servio la protección de la integridad de la información.

Además, incluye un aviso explícito sobre las amenazas que supone la información generada por IA, y una llamada hecha por ambos sobre las amenazas que supone la información generada por la IA. También llama a que las plataformas se esfuercen más para apoyar el acceso de los investigadores a los datos. Especialmente, para el estudio de los riesgos que suponen para la sociedad.

Sobre la identidad digital, el acuerdo hace referencia a la colaboración en el trabajo sobre estándares, ya que «la próxima fase del proyecto se centrará en la identificación de casos de uso potenciales para la interoporabilidad transatlántica, así como en la cooperación con vistas a la activación del uso transfronterizo de identidades y monederos digitales«.