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La revolución cultural silenciosa de Tim Cook en Apple

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Tim Cook

Tim Cook

Poco después de que firmara como directora de operaciones de Facebook, Sheryl Sandberg estuvo buscando gente con un cargo similar que le explicara que podría esperar de ella su joven y brillante jefe. Por eso llamó a Tim Cook.

«Él me explicó bastante bien que mi trabajo consistía en hacer las cosas en las que Mark (Zuckerberg) no quería perder mucho tiempo«, resumió Sandberg en la reunión con Cook, que entonces era director de operaciones de Apple, según indican en Reuters. «Básicamente, ese era su trabajo con Steve. También me dijo que mi trabajo iba a cambiar con el tiempo y que debía estar preparada para eso».

Mientras que Sandberg ha disfrutado de una estable carrera en Facebook, el puesto de Cook es el que ha cambiado radicalmente desde entonces. Ahora, el hombre que tenía una de las tareas más desalentadoras de los negocios, hacer lo que Jobs no quería y mantener a Apple en lo más alto, podría necesitar un poco de consejo.

Tras dos años dirigiendo Apple, se espera que Cook presente un rediseño de iPhone el próximo mes. Será un momento clave para él ya que la empresa que «heredó» ha pegado un gran cambio: ahora es un gigante corporativo maduro en lugar del pionero de una industria rudimentaria, con el precio de sus acciones un 5% más bajas, a pesar de haber vivido una recuperación reciente.

Esta transición fue, tal vez, inevitable después de una asombrosa carrera durante cinco años en la que se triplicó la plantilla de Apple y sus ingresos se multiplicaron por seis, sus beneficios por doce y sus acciones subieron de 150 a 705 dólares.

No es oro todo lo que reluce

No está muy claro si la idea de Cook de orientar la filosofía de la empresa hacia el consenso podría modificar la cultura que Jobs construyó en la empresa. Aunque Cook ha manejado hábilmente el iPhone y las líneas de productos del iPad, que siguen aportando enormes beneficio, lo cierto es que Apple debería lanzar un producto nuevo e importante bajo el mandato de Cook, se habla de relojes y televisores, pero se queda en eso.

A Cook se le conoce como un adicto al trabajo que cuida su privacidad. La gente que lo conoce bien lo describen como un ejecutivo pensativo, que sabe escuchar y que puede ser encantador y divertido en ‘petit comité’. Conserva a muchos de sus amigos de la infancia que lo recuerdan como un adolescente alegre que le gustaba cantar y hacer reír.

En el día a día en Apple, Cook ha creado un estilo metódico, sin sentido claro, que es una de las grandes diferencias con su predecesor. Han desaparecido las reuniones bimensuales que hacía Jobs sobre el software del iPhone. «Ese no es el estilo de Tim en absoluto. Él delega», dijeron a Reuters personas familiarizadas con el asunto. Sin embargo, también tiene su lado oscuro. Parece ser que en las reuniones, Cook se sienta en silencio con las manos juntas y balanceando su silla, como reflexionando y sin decir nada, la única señal por la que sus trabajadores pueden pensar que algo va mal es si hay algún cambio en el ritmo de este balanceo.

«Podría sentenciarte», dijeron las mismas fuentes. «Si él decía algo en la línea de ‘creo que eso no es lo suficientemente bueno’ sería su final y probablemente el tuyo».

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Periodista especializada en tecnologías corporate, encargada de las entrevistas en profundidad y los reportajes de investigación en MuyComputerPRO. En el ámbito del marketing digital, gestiono y ejecuto las campañas de leads generation y gestión de eventos.

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