Las empresas posponen proyectos de Big Data por desconocimiento legal

Una de cada cinco empresas españolas se ha visto obligada a posponer durante el último año algún proyecto que incluía el uso de tecnologías de Big Data, por el simple hecho de desconocer el ámbito legal sobre el uso y tratamiento de datos personales, según estimaciones de Paradigma, multinacional española dedicada a la transformación digital de las empresas.

De esta manera, desde IDC aseguran que las compañías de seguros, bancos y finanzas y las empresas vinculadas a los medios de comunicación serán las que protagonicen los mayores ratios de crecimiento en inversión de proyectos de Big Data durante el año 2016.

Para evitar estos problemas, Paradigma ha desvelado cinco recomendaciones para acometer con seguridad proyectos de Big Data:

1.- No hay que rechazar de base un proyecto de Big Data. Porque si se ajusta al marco normativo actual y con las herramientas, tecnologías y servicios disponibles, se pueden llegar a realizar proyectos de Big Data que respeten los requisitos de información y consentimiento por parte de los usuarios.

2.- Se debe trabajar de forma conjunta entre los departamentos de TI, marketing y legal. Porque así se pueden ver rápidamente los desafíos que plantea el proyecto, así como también dar una respuesta ágil a las necesidades del proyecto.

3.- Hay que apostar por tecnologías que ya están diseñadas para cumplir con los requisitos legales de uso y tratamiento de datos personales. No es necesario siempre innovar o rebuscar mucho para encontrar soluciones en el mercado que ya cumplen con la normativa, por lo que pueden emplearse sin temor a incumplir la legislación vigente.

4.- Es necesario contar con el recurso de anonimizar datos personales. Esto es debido a que algunos proyectos no necesitan en su esencia ir asociados a nombres y datos concretos, por lo que se pueden usar herramientas que permiten anonimizar los datos y así poder acometer el proyecto.

5.- Se debe valorar las oportunidades que ofrece el proyecto, puesto que una vez se comprueben los beneficios operacionales y oportunidades de negocio que pueden generarse a través de proyectos de Big Data, las empresas pueden ponerlos en marcha. Y, en todo caso, se puede reforzar la vigilancia sobre aquellos aspectos más críticos del proyecto en materia de tratamiento de datos personales.