La Generación Z pide una red de transporte más inteligente

Xerox, especializado en ayudar a gobiernos en todo el mundo a resolver los problemas relacionados con el transporte, ha presentado un nuevo estudio que destaca cuáles son las preferencias de la Generación Z (entre los 18 y los 24 años) en Europa, en lo que a coches autónomos y servicios digitales inteligentes se refiere.

Según este informe, para el año 2025, un tercio de la población entre los 18 y los 24 años espera poder usar coches autónomos, un 41% afirma que no usará dinero en efectivo para pagar el transporte, y poco más de la mitad tendrá en cuenta la disponibilidad de servicios de transporte a la hora de decidir dónde vivir y trabajar.

Las conclusiones del estudio también ponen de manifiesto que este grupo de ciudadanos, conocido como “futuros viajeros frecuentes”, ya está llevando a cabo lo que están aconsejando a la hora de desplazarse por su ciudad y el tipo de transporte utilizado.

El 63% de los encuestados afirma que utiliza su smartphone o tablet como dispositivo principal para planificar trayectos y recibir información de su viaje; aproximadamente cuatro de cada diez ya emplean métodos de pago sin usar dinero en efectivo, como aplicaciones móviles o la opción de pago sin contacto ; y alrededor de un tercio usa aplicaciones para obtener información sobre transporte, horarios, tráfico y para reservar trayectos.

Al comparar las ciudades participantes en este informe, París resulta ser la “más inteligente”, dado que casi la mitad de los entrevistados usa los smartphones y tablets como su dispositivo principal para planificar los desplazamientos y el transporte, frente al 33% de la media europea.

El estudio también destaca las diferencias que existen entre estos países cuando se les pregunta acerca del alcance de un transporte más inteligente para el año 2025. Casi la mitad de los entrevistados en Bélgica y Países Bajos espera contar con un transporte en el que se pueda pagar sin efectivo para el año 2025. De media, uno de cada tres franceses espera utilizar coches eléctricos o autónomos en 10 años; y el 35% de los encuestados en Reino Unido, Alemania y Bélgica tendrán en cuenta el transporte público a la hora de elegir dónde vivir y trabajar.