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Wing, filial de Alphabet, consigue autorización para hacer repartos con drones en EEUU

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Wing, filial de Alphabet, consigue autorización para hacer repartos con drones en EEUU

Wing, una filial de Alphabet nacida de su división de proyectos de alta tecnología Google X, se ha convertido según Bloomberg en el primer operador de drones en recibir la autorización del gobierno estadounidense para funcionar como línea aérea. Se trata de un paso muy importante para conseguir realizar repartos con drones en EEUU, ya que hasta ahora, las compañías que quieren dedicarse a ello solo habían logrado autorizaciones para realizar vuelos de pruebas o hacer repartos en distancias cortas. Nunca se había otorgado a una empresa de drones la misma aprobación que obtienen las líneas aéreas tradicionales o las compañías aéreas de reparto, en naves más pequeñas.

Por lo tanto, la compañía podrá llevar a cabo sus planes para empezar con el reparto de pequeños paquetes, lo que comenzará a hacer dentro de unos meses en dos comunidades rurales de Virginia: Blacksburg y Christianburg. Por ahora, la compañía sólo podrá realizar repartos en determinadas áreas, entre las que no se encuentran las zonas urbanas. Tampoco aquellas en las que haya grandes aglomeraciones de personas. Así lo establecen las leyes sobre drones en vigor.

A diferencia de lo que sucede con otras compañías, Wing sólo realizará repartos de mercancías adquiridas en tiendas y negocios locales. Por lo tanto, conseguida la licencia para operar en las zonas mencionadas, comenzará a partir de ahora a buscar en ambas comunidades vendedores que quieran trabajar con el reparto con drones. Se espera que los vuelos de reparto en dichas áreas puedan comenzar en unos meses.

El modelo que utiliza Wing es un híbrido entre un helicóptero y un avión. Puede despegar en vertical y volar en horizontal a gran velocidad. Lleva los paquetes enganchados en su parte inferior, y cuando llega a su destino los baja a los patios y las entradas de las casas de los compradores, para lo que utiliza un cable. Mientras, se mantiene en vuelo a una altura de seguridad, superior a la de los humanos.

A pesar de estas limitaciones, la autorización que la FAA ha otorgado a Wing, que también ha conseguido la aprobación para reparto con drones en Australia, proporciona a la empresa la posibilidad de cobrar por el reparto de mercancías en Virginia, y le da la oportunidad de solicitar permisos para expandir sus operaciones a otras zonas.

Para obtener este permiso, Wing ha tenido que cumplir los mismos requisitos que las líneas aéreas. Para empezar, las compañías que lo solicitan deben ser propiedad, en su mayoría, de ciudadanos estadounidenses que cumplan una serie de requisitos. Además, Wing tuvo que redactar manuales muy detallados, además de desarrollar y poner en marcha rutinas de entrenamiento y una jerarquía de seguridad, como hacen las compañías aéreas convencionales. También tuvo que proporcionar gran cantidad de documentación cuando solicitó la licencia. Entre ella estaban los registros de miles de vuelos seguros llevados a cabo en Australia en los últimos años.

Según el CEO de Wing, James Ryan Burgess, la compañía considera que para ellos es muy importante «haber conseguido la aprobación de la FAA para operar un negocio con nuestra tecnología«. Para él, que ha destacado que han tardado varios meses en conseguir la licencia, se trata de un paso crucial para su empresa en particular y para el sector de los drones en general.

También demuestra la rápida maduración que está experimentando la tecnología de los drones, y «que estos dispositivos pueden aportar valor a nuestras comunidades. Pueden ser un sistema de transporte de mercancías más rápido, más limpio y más económico«.

Redactora de tecnología con más de 15 años de experiencia, salté del papel a la Red y ya no me muevo de ella. Inquieta y curiosa por naturaleza, siempre estoy al día de lo que pasa en el sector.

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