Confirmado: Nvidia abandona definitivamente la compra de ARM

Después de un par de semanas de rumores, el abandono del intento de Nvidia de comprar ARM ya es un hecho. La noticia la han confirmado de manera conjunta la compañía matriz de ARM, SoftBank, y Nvidia, en un comunicado en el que aluden como razón para el final del acuerdo al que había llegado con Nvidia a los «problemas regulatorios» que han obstaculizado la operación. Desde Muycomputer recuerdan además que el acuerdo no gustó ni un pelo a varios de los principales clientes de ARM, que se oponían a su venta. Así pues, Nvidia ya no invertirá 66.000 millones de dólares en la operación.

Como era de esperar, la ruptura de la operación lleva aparejadas consecuencias de todo tipo. Las económicas pasan porque Nvidia pague 1.250 millones de dólares por no seguir adelante con la transacción. Pero hay más: el CEO de ARM, Simon Segars, ha dimitido. Le sustituirá Rene Haas, Responsable de Propiedad Intelectual (IP) de ARM. Según SoftBank, los planes de futuro de ARM ahora pasan por salir a bolsa a lo largo del año fiscal que comienza el próximo 1 de abril.

De llevarse a cabo, la compra de ARM por parte de Nvidia, anunciada en septiembre de 2020, habría sido una de las mayores operaciones del sector. Nvidia contaría con el control de la empresa cuya arquitectura y propiedad intelectual son claves para muchos chips de prácticamente todos los smartphones y tablets que se han fabricado hasta ahora, así como para los que se integran en un buen número de servidores.

El acuerdo suscitó todo tipo de críticas y desconfianzas desde que se anunció, y las autoridades reguladoras de Reino Unido, Estados Unidos o la Unión Europea habían anunciado la apertura de investigaciones del acuerdo. Todo apuntaba en que las conclusiones de varias iban  a desembocar en un veto por problemas de monopolio.

El CEO de Nvidia, Jensen Huang, tuvo que defender la operación públicamente varias veces, aunque terminó por admitir que el cierre de la operación iba a llevar bastante más tiempo de lo que pensaban en un principio. Finalmente, no se completará, porque los reguladores de varios países, e incluso la FTC, que ha intentado detener la compra, no se fiaban de lo que Nvidia iba a hacer con la propiedad intelectual y los diseños y chips de ARM.