Intel Sapphire Rapids no llegará hasta mediados de 2023, según el analista Ming-Chi Kuo

Hace unos días vimos que el lanzamiento de los procesadores Intel Sapphire Rapids podría haber sufrido un nuevo retraso. Las palabras de Sandra Rivera apuntaban en esa dirección, y hoy esta teoría ha ganado peso gracias a las últimas predicciones que han lanzado algunos analistas, entre los que se encuentra el prolífico Ming-Chi Kuo.

Intel Sapphire Rapids representa una importante evolución frente a los actuales Intel Ice Lake-SP, tanto en materia de rendimiento bruto como por especialización y diseño, no en vano esta nueva generación de procesadores de alto rendimiento supone el salto a un diseño modular con un total de varios bloques, y estará disponible además en versiones con memoria HBM integrada.

El gigante del chip tenía previsto lanzar los Sapphire Rapids a finales de este año, pero según Ming-Chi Kuo, analista de TF International Securities, al final esto no va a ser posible. No ha dado un porqué, pero con toda la información que tenemos hasta ahora podemos sacar en claro que la razón clave estaría en que la producción de esta nueva generación de procesadores no está escalando tan bien como se esperaba, y que por eso Intel necesita un poco más de tiempo.

Esto es lo que ha comentado Kuo al respecto:

«Mi última revisión de la cadena de suministro indica que los esperados envíos del chip de servidor Intel Sapphire Rapids podrían posponerse hasta el segundo trimestre de 2023, un retraso importante frente a la previsión actual del segundo semestre de 2022, algo que es desfavorable para Intel y su cadena de suministro de servidores. […] Sapphire Rapids se ha retrasado varias veces (el plan de envío inicial estaba marcado para finales de 2021), lo que significa que la ejecución de Intel todavía tiene mucho margen de mejora, lo que me hace más cauteloso sobre el compromiso de Intel con los planes de envío futuros para nuevos chips basados en nodos más avanzados».

El analista ha dejado caer algo muy interesante al final de su exposición, ya que ha indicado que este retraso podría afectar al lanzamiento de futuros productos de Intel para servidores, incluyendo Emerald Rapids, que será el sucesor de Sapphire Rapids y que estará fabricado en el nodo Intel 7. Su lanzamiento estaba previsto para la segunda mitad de 2023, pero si se confirma que Sapphire Rapids llega en el segundo trimestre de 2023 esa fecha no tendría ya ningún sentido, como es evidente.